Para muchos hogares mexicanos el invierno significa un aumento inevitable de las facturas de luz, hecho que impacta directamente en la economía familiar. En este artículo te contamos cómo ahorrar energía en invierno y qué estrategias puedes emplear manteniendo el confort de tu hogar.
¿Cuánta energía extra se consume en invierno?
El mayor consumo de energía en invierno es una realidad que afecta a millones de hogares mexicanos, especialmente en las regiones del norte donde las temperaturas descienden considerablemente y la calefacción es una necesidad, generando que la factura de luz en invierno sea más elevada.
Este aumento se debe a distintos factores, como el uso intensivo de calefacción, la menor cantidad de horas de luz natural disponible, lo que aumenta el consumo de luz artificial y la suspensión de los subsidios que la CFE otorga durante el verano, lo cual complica el objetivo de ahorrar energía en invierno.
¿Es posible ahorrar energía en invierno?
Sí. Sin duda ahorrar energía en invierno es posible a través de la implementación de distintas medidas de eficiencia energética y la adaptación de nuestros hábitos de consumo a través de pequeños cambios. Hay distintas estrategias, como la aplicación de principios de eficiencia energética y el análisis de cada aparato que se utiliza.
Cómo ahorrar energía en invierno: 10 consejos clave
A continuación te indicamos cómo ahorrar energía en invierno, a través de 10 consejos que pueden ayudarte a reducir el monto en tu factura de la CFE sin renunciar al confort y haciendo un uso que si bien es necesario, también puede ser responsable con tus finanzas. Además, si vives en uno de estos estados, puede que tu factura sea mayor.
Mantén la temperatura del termostato entre 19°C y 21°C
La temperatura ideal para ahorrar energía en invierno se sitúa entre los 19°C y los 21°C. Cada grado que aumentes incrementará el consumo energético en un estimativo 7%. Ten en cuenta que si mantienes tu casa a 24°C y reduces la temperatura a 21°C, puedes alcanzar un ahorro del 21% en tu factura.
Instala un termostato programable
A través de un termostato programable puedes establecer los horarios en que funcionará el sistema de calefacción y controlar de esta manera el consumo de manera precisa. Los termostatos te permiten ahorrar hasta un 33% de energía en invierno, garantizando que tu vivienda esté caliente solo cuando se necesita.
Aprovecha la luz natural durante el día
Es una estrategia simple pero efectiva. Al aprovechar al máximo la luz solar evitas gastos extra en luz artificial y además aprovechas un recurso que no tiene costo adicional. Lo ideal es que despejes las ventanas durante el día, permitiendo que entre la mayor cantidad de luz, y las cubras cuando sea de noche, para evitar pérdidas de calor.
Mejora el aislamiento térmico de tu hogar
Otra medida para ahorrar energía en invierno consiste en un buen aislamiento térmico, lo que te permite generar una una calefacción eficiente y puede reducir la pérdida de calor hasta en un 50%. Se puede obtener con ventanas de doble acristalamiento, burletes en puertas, sellado de grietas y el uso de cortinas gruesas.
No calientes habitaciones que no utilizas
Aunque muchos no lo tienen en cuenta, calentar toda la casa cuando solo utilizas ciertas habitaciones representa un desperdicio significativo de energía. Mantén cerradas las puertas de habitaciones desocupadas y ajusta los radiadores para que concentren su energía en las zonas que realmente ocupas.
Utiliza iluminación LED de bajo consumo
Como en invierno las horas de luz natural se reducen significativamente, generar un ahorro en la luz artificial puede generar un impacto considerable en la factura de luz en invierno. Por eso, usar bombillas LED que consumen hasta 80% menos energía que las bombillas tradicionales es una buena táctica de ahorro.
Apaga completamente los aparatos electrónicos
Apaga televisores, computadoras, cargadores y otros dispositivos que si bien no están en uso, pueden representar hasta 10% de tu factura eléctrica en modo standby, simplemente por permanecer conectados, algo que se conoce comúnmente como consumo vampiro.
Mantén en buen estado tus equipos de calefacción
Si revisas tus sistemas de calefacción de manera regular, te aseguras de mantener su rendimiento en niveles óptimos, lo cual se traduce en eficiencia energética y ahorro de energía en invierno. Mantenerlos limpios, sin polvo, asegurándote de que no haya fugas en rejillas o debajo de puertas genera un mejor flujo de aire.
Evita usar calefactores eléctricos de resistencia
Esto es así porque los calefactores eléctricos de resistencia son el sistema más caro para calentar tu casa. Existen opciones más eficientes como los radiadores de aceite o los sistemas de bomba de calor, los cuales consumen considerablemente menos energía en el mismo tiempo de funcionamiento.
Utiliza alfombras y textiles para conservar calor
Los elementos textiles como alfombras, cortinas gruesas y tapetes son grandes aliados para ahorrar en tu factura de la CFE, ya que actúan como aislantes térmicos naturales. Las alfombras son especialmente efectivas en pisos de cerámica o concreto que tienden a mantenerse fríos.
Cómo ahorrar energía en invierno con la calefacción
A continuación te indicamos cómo ahorrar más energía en invierno, priorizando el uso de un sistema de calefacción, sin renunciar a cierto confort, pero aún así buscando que la factura de la CFE no alcance niveles elevados que puedan afectar tu economía.
Elige el sistema de calefacción más eficiente
Se sabe que no todos los sistemas de calefacción consumen la misma cantidad de energía. Por ejemplo, las bombas de calor eléctricas son más eficientes en términos de rendimiento, el suelo radiante distribuye el calor de manera más homogénea y no genera pérdidas a través del techo o las paredes.
Mantén la temperatura constante
Una temperatura templada durante un periodo más largo es más eficiente que realizar un golpe de calor, en términos de ahorro energético, ya que al encender y apagar los sistemas de calefacción se empuja al sistema a trabajar al máximo. Es más recomendable dejar la temperatura a un mínimo de 16°.
Programa la calefacción para que encienda antes de tu llegada
También puedes evitar los golpes de calor programando la calefacción para que se encienda una hora antes de tu llegada, en vez de mantenerla todo el día encendida. Es una estrategia realmente efectiva si trabajas fuera de casa durante el día y acomodas la temperatura para los horarios en los que estarás presente.
¿Cuánta energía puedo ahorrar en invierno?
El ahorro de energía en invierno que puedes alcanzar dependerá de muchos factores, en particular cuánto estás dispuesto a ceder en tu confort y cuáles opciones de ahorro tienes a tu alcance. Lo cierto es que sin demasiados cambios, solo prestando atención a los consejos antes mencionados, tu factura se puede reducir entre un 20 y un 40%.
¿Qué pasa si no intento ahorrar energía en invierno?
Si no tomas medidas para ahorrar energía en invierno probablemente recibas facturas de luz mucho más elevadas, ya que el consumo eléctrico puede aumentar hasta un 30% durante la temporada, lo que implica recibos duplicados o triplicados con respecto al monto que pagas en otros momentos del año.
¿Un sistema de autoconsumo puede ayudar en invierno?
Definitivamente, sí. Un sistema de autoconsumo con paneles solares puede ayudar significativamente a reducir tu factura durante el invierno, ya que la mayoría de las calefacciones que se utilizan en residencias funcionan mediante radiadores eléctricos, los cuales pueden alimentarse sin problema con energía solar.
¿Los paneles solares funcionan en invierno?
Sí. Los paneles solares continúan generando energía durante toda la temporada fría. Es cierto que su producción se reduce en un 10 o 20% con respecto a otros periodos del año, pero sus módulos siguen funcionando, ya que generan energía a través de la luz, no del calor. Su mejor rendimiento, de hecho, ocurre cuando el ambiente está templado.
Ahorrar energía en invierno puede ser una ayuda importantísima para la economía de muchas familias en México, en especial porque puede conseguirse un ahorro significativo sin renunciar al confort y aprovechando una serie de medidas mínimas al alcance de muchas personas. Incluso, si necesitas cambiar tus electrodomésticos, la CFE ofrece este tipo de ayudas.