El tiempo se agota para el desarme nuclear
Jayantha Dhanapala fue galardonado con el Premio al Logro Internacional por el Desarme Nuclear de la agencia de noticias Inter Press Service (IPS) este año.
Jayantha Dhanapala fue galardonado con el Premio al Logro Internacional por el Desarme Nuclear de la agencia de noticias Inter Press Service (IPS) este año.
Con la creación de la Corte Penal Internacional, el 17 de julio de 1998, se perdió una oportunidad magnífica para enjuiciar los crímenes ecológicos –daños graves al medio ambiente, causados deliberadamente o por negligencia culpable– que aunque sí que se previeron en los primeros borradores realizados por la Comisión de Derecho Internacional de la ONU, acabaron desapareciendo del texto definitivo al igual que le sucedió a otros delitos, como el tráfico de estupefacientes o el de órganos humanos; de esta forma, la competencia de la Corte se centró, exclusivamente, en los crímenes de genocidio, lesa humanidad, guerra y agresión.
Si entendemos genocidio, según el derecho internacional, como el plan sistemático que consiste en la comisión, por funcionarios del Estado o particulares, de un exterminio o eliminación sistemática de un grupo social por motivos de nacionalidad, etnia, raza o religión a través de la muerte y lesión a la integridad física o moral de los miembros del grupo, definitivamente Israel comete genocidio sobre la población palestina. Lo hacía antes de la última campaña sobre Gaza y lo perfecciona y desarrolla también sobre la población de Cisjordania.