La necesidad de los sellos de certificación ecológica

Consumir productos ecológicos no sólo supone alimentarnos y vivir de una forma más saludable, también contribuye a la lucha por un futuro más digno para nuestros hijos y por un planeta sostenible, libre de químicos y transgénicos. En España llevamos un rato en camino pero si miramos a otros países de nuestro entorno, comprobamos que hay mucho por recorrer y que no es una apuesta idealista sino una cuestión de voluntad y sentido común. Según los datos de la Comisión europea, de 2000 a 2011 la demanda de alimentos ecológicos en Europa se cuadruplicó. Más del 70% de los europeos confía en los productos ecológicos aunque, de ese número, casi un 60% opina que habría que mejorar el sistema de control.

Apuntes sobre la crisis ambiental, modelo de desarrollo y ética

El estilo o modelo de desarrollo vigente, que se viene imponiendo desde el siglo pasado, no tiene respuestas frente a la crisis ambiental. Más bien la ha generado. El modelo busca un crecimiento económico continuo. La expansión de la economía está basada en el consumismo. Necesita de una “sociedad de consumo” y materialista por ende, donde el afán de lucro y el individualismo es el combustible.

El mercado para legos

En la economía de mercado, sus voceros anuncian la salvación de la humanidad si dejamos actuar su mano invisible mediante la ley de la oferta y demanda. Defensores acérrimos del lucro, la usura, practicantes del individualismo, la moral egoísta, la competitividad y el despilfarro, no tienen escrúpulos en mentir. Tras años de predicar las buenaventuras del dios mercado, ninguna de sus promesas se han cumplido. Más inflación, desempleo, pérdida de derechos sociales y políticos, por tanto involución en los derechos humanos. La crisis actual lo atestigua.

Primer Mundo ¿Modelo de Desarrollo?

El hiperconsumismo es el resultado de la invención interesada de generar compulsivamente la satisfacción de necesidades artificiales en busca del lucro y la acumulación de dinero en manos de unos pocos a costa de la dependencia de la mayoría y de la explotación a toda forma de vida. Mucho se ha escrito demostrando la inviabilidad del modelo del “primer mundo”, el modelo civilizatorio de las tres “ex”: explotación, exclusión y extinción.