Recuerdo de la selva de los Tacanas
Es tan feliz lo que voy escribir que no sé por dónde empezar…Si por las aguas calientes del río que te agasajan cuando acudes y las navegas con ese fasto que sólo atesoran los ríos. Si por los niños que se crían a caballo y uno los sueña siempre rebeldes, siempre libres, siempre niños.