Los depredadores dependen cada vez más de la basura

Durante milenios, los depredadores han aprendido a evitar a los humanos. Ahora, sin embargo, se acercan a ellos, a su basura, a sus desechos, a sus descartes. Esta cercanía está alterando la conducta y la ecología de dingos, zorros, osos y hasta leones. Los animales más urbanizados ya tienen diferencias genéticas respecto de sus congéneres rurales. Incluso los científicos temen que esté en marcha una segunda domesticación de animales tan emblemáticos como el lobo.