El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires firmaron un convenio que promueve la implementación de tecnologías sustentables como los techos verdes y jardines verticales en los espacios urbanos y edificios públicos.
Se trata de tecnologías adoptadas por las ciudades para fomentar la resiliencia que disminuyen la polución del aire y el efecto isla urbana, mejoran la estética visual y la calidad de vida, conservan energía, favorecen la formación de corredores de flora y fauna y retrasan el escurrimiento del agua de lluvia.
Recordemos que la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que la contaminación del aire representa un importante riesgo medioambiental para la salud y contribuye a la morbilidad derivada de accidentes cerebrovasculares, cáncer de pulmón y neumopatías crónicas y agudas, como lo es el asma.
Así es como mediante el Instituto de Floricultura del INTA Castelar se dictarán capacitaciones, charlas y talleres en referencia a los beneficios de la implementación de estas tecnologías, se definirán estrategias de estudio de espacios verdes y sustentabilidad ambiental de la ciudad. Asimismo, propondrán normativas ambientales y contribuirán con el equipamiento tecnológico necesario para realizar estudios y proyectos de innovación, investigación tecnológica específicos.
Los sistemas verticales tales como cortinas verdes o jardines verticales permiten atenuar la radiación estival, enfrían el ambiente por evapotranspiración (por lo que disminuye la necesidad de una refrigeración artificial), mitigan el efecto de isla de calor y disminuyen la acción de los vientos.
A su vez, los techos verdes son tecnologías cada vez más difundidos en las ciudades, por permitir el aprovechamiento de terrazas y superficies de cemento para producir flores y hortalizas, al tiempo que disminuyen la polución del aire, transforman los paisajes y aportan a la calidad de vida.
Foto: Matilde Moyano
Ecoportal.net
El Federal