“Agua-Chile”. Crisis y Catástrofe Total

Por Dr. Marcos Sommer

Si Chile sigue desperdiciando y destruyendo sus recursos hídricos y ecosistemas de los que dependen, tanto las personas como las sociedades, sufrirán en última instancia inseguridad social y económica por cuanto habrá ríos, lagos y reservas subterráneas gravemente deteriorados y se enfrentarán a conflictos cada vez más graves.

Con la aprobación de la Resolución de Calificación Ambiental del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (Seia, Ley de Bases N°.19.300)- se autorizo la descarga de desechos de la Planta de Celulosa Arauco (CELCO), a 15 Km. aguas arriba del Humedal RAMSAR (1981).

Sus residuos (900 litros por segundo) van al Río Cruces y los olores nauseabundo han llegado a Valdivia (50 km.). La extinción de especies de agua dulce y el deterioro del humedal "Santuario de la Naturaleza" (primera área RAMSAR en Chile), que es vital para los recursos hídricos, destruyen la base para el desarrollo sustentable de comunidades y sociedades en la Región Décima.


Si Chile sigue desperdiciando y destruyendo sus recursos hídricos y ecosistemas de los que dependen, tanto las personas como las sociedades, sufrirán en última instancia inseguridad social y económica por cuanto habrá ríos, lagos y reservas subterráneas gravemente deteriorados y se enfrentarán a conflictos cada vez más graves en tiempo de escasez.

La historia de la humanidad está marcada por innumerables conquistas tecnológicas, por el progreso de las relaciones entre las personas y por la capacidad creativa del ser humano para superar cada desafío. Sin embargo, desde la prehistoria hasta nuestros días, el desarrollo de las civilizaciones siempre ha evolucionado marcado por un factor: la presencia o la ausencia del agua. Si está presente y en abundancia, el agua representa la posibilidad de mejoramiento agrícola, social, industrial, sanitario y de la calidad de vida. Si el recurso hídrico esta ausente o escasea, es motivo de pobreza, guerras, enfermedades y estancamiento económico.

Lamentablemente, todos los días se desperdicia millones y millones de litros en actividades que desvalorizan el agua. El abuso en el uso del agua no es solamente un desconocimiento de las responsabilidades de los ciudadanos de evitar el desperdicio, sino una falta de respecto a aquellos que viven en regiones donde no hay agua disponibles para todos.

Como parte de una tendencia mundial, la utilización de recursos para consumo humano está aumentando en progresión geométrica en América Latina, impulsada por el crecimiento de la población y una economía que crece con rapidez. De hecho, la mundialización de la economía y el desarrollo de mercados de comercio regional (MERCOSUR, NAFTA etc.) ejerce gran presión para que la utilización de recursos en la región sea aún más intensiva.

La necesidad apremiante de hacer frente a la progresión geométrica de la demanda de agua dulce se esta complicando aun más, las tendencias actuales indican, que la base de los recursos se deterioren a una velocidad cada vez mayor. La deforestación de las cuencas, la erosión, la contaminación y el agotamiento de las aguas subterráneas se encuentran entre las principales amenazas al abastecimiento de agua dulce en la región.

La diversidad de especies y ecosistemas dentro del bioma de agua dulce en América Latina es notable. Muchas veces los biólogos han llamado a Sudamérica el "continente de los pájaros", en circunstancias de que sería más procedente llamarlo el "continente de los peces". Casi la mitad de todos los vertebrados descritos son peces teleósteos y se estima que de ellos, una cuarta parte se encuentra en el Neotrópico. A pesar de su importancia crítica, se considera que muchos ecosistemas de agua dulce carecen de utilidad. La ignorancia generalizada sobre su importancia ha contribuido a este concepto y promovido la destrucción y degradación de esos ecosistemas. Además, hay una falta generalizada de conocimiento del vínculo que existe entre la utilización de recursos hídricos y los ecosistemas que abastecen del agua. Como consecuencia no hay mayor impulso para una ordenación sostenible de los recursos hídricos.

Los humedales son un componente vital del ciclo de agua dulce, son los proveedores tanto en cantidad como en calidad de agua, de modo que mantener los humedales saludables permite garantizar el suministro de agua.

El proceso de destrucción de los humedales se esta acelerando más allá de las proyecciones que los científicos, desde hace algunos años vienen advirtiendo.

El Santuario de la Naturaleza "Carlos Anwanter" en el Río Cruces (Chile-X Región), es el Sitio que Chile incorporó en 1981 como Humedal de Importancia Internacional al momento de adherirse a la Convención RAMSAR, Convención relativa a los Humedales de Importancia Internacional especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas. La formación del humedal está ligada al terremoto de 1960, que provocó el hundimiento e inundación de grandes extensiones de terreno. Así se formó un humedal que abarca una superficie de 4.877 hectáreas e incluye el lecho, islas y zonas de inundación de los Ríos Cruces y Chorocamayo, en una longitud aproximada de 25 kms. y de 2 kms. de ancho como promedio.

La fauna silvestre de los humedales es quizás, una de las más ricas y variadas del planeta. Las innumerables micro habita, la enorme productividad primaria y los nutrientes que por el circulan, ayudan a explicar esta inestimable diversidad. El nuevo humedal del Río Cruces fue colonizado por plantas acuáticas y vegetación emergente, así como gran número de animales. En especial las aves encontraron en esta área refugio para vivir y reproducirse. Se estima que hasta antes del desastre era hábitat de al menos 20 mil aves de distintas especies, entre ellas cisnes de cuello negro (Cygmusmelancoryphus), taguas (Fulica armillata), coipos (Miocastor coipus), garzas, cuervos de los pantanos, águila pescadora así como de otras especies como la nutria o hullín.

El Santuario y sus Cisnes forman parte de la identidad e imagen de las habitantes de la cercana ciudad de Valdivia, estrechamente ligadas al paisaje fluvial.


Avistamientos de cisnes de cuello negro.


Nutria en el humedal "Santuario de la Naturaleza".

Miles de turistas navegan anualmente la red fluvial de Valdivia para ver de cerca los cisnes de cuello negro, singular especie, caracterizada por su condición monógama, pues cada ejemplar sólo tiene una pareja en el transcurso de su vida.

El humedal no es sólo de importancia a nivel chileno, sino también sudamericano pues constituye el primer lugar de anidación de los cisnes de cuello negro. También existen aves chilenas y otras de América del Sur que vienen a reproducirse año a año.

La población de los cisnes de cuello negro, un ave migratoria fue terriblemente afectada. El problema se manifestó en la población de estos cisnes que era de 6 a 8 mil especies, en el mes de Octubre del 2004 se redujo a 900. La crisis medio ambiental fue desatada con la aparición de decenas de cisnes muertos o desnutridos, con ceguera, deformación en el hígado y con alteraciones neurológicas. Se identificó que la razón de lo ocurrido fue que las algas luchecillo (Egeria densa) que forman verdaderas praderas sumergidas, con la que se alimentan los cisnes, desapareció prácticamente del humedal.

El hecho que los cisnes no hayan anidado durante la temporada (2004), son signos indesmentibles de un grave deterioro en las condiciones del ecosistema del humedal. Este desastre ecológico afecto igualmente a taguas, a los roedores vegetales, a los coipos, y diversas tipos de peces, que también se encontraron muertos.


Alga luchecillo (Egeria densa).

El último informe ambiental (Febrero, 2005) realizado por la Universidad de Concepción, definitivamente establece que la Planta de Celulosa Valdivia de la empresa Arauco a 15 km. aguas arriba del humedal protegido, deposito elementos químicos altamente peligrosos, y sin el tratamiento requerido por la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) que la autorizó a operar en febrero de 2004.

Desde la planta fueron vertidos a las aguas del río Cruces, al menos tres veces, elementos químicos "propios del licor negro", con este término se conoce a las emisiones de un peligroso concentrado de elementos químicos "como iones de sodio, cloruro, sulfato, manganeso, clorato, aluminio y otros iones inorgánicos, presentes en los reactivos químicos utilizados en los procesos y componentes originales de la madera". Sostiene el informe, que todo esto tiene el nombre de "conductividad eléctrica", que es "una medida de la concentración iónica presente en el efluente", vale decir, presente en lo que se deposita en los cursos de aguas donde botan sus residuos las plantas de celulosa, que en el caso de la planta Valdivia es el Santuario Natural "Carlos Andwanter" del río Cruces.

La inversión inicial de la empresa modelo Celulosa Arauco fue de mil millones de dólares, alcanzando una producción anual de 850.000 toneladas de celulosa. Fue la primera empresa sometida a un Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (Seia) y una de las pocas en el mundo con un sistema de tratamiento terciario para la evaluación de fluidos. Unos 75 millones de dólares correspondieron a los costos ambientales (Seia).