Por Dr. M. Sommer
El procedimiento elegido para deshacernos de la basura ha sido la disposición de las mismas en zonas bajas, inundables, mediante la creación de los rellenos sanitarios. "Mas del 80 por ciento de las reservas pesqueras comercialmente explotables en el Atlántico suroccidental y el 40 por ciento en el Pacifico suroriental son explotadas al máximo excesivamente o están agotadas". El accionar del hombre fue siempre insignificante, comparado con la magnitud del ecosistema marino; todo era compensado por la naturaleza. El mar y la atmósfera se comportaban como infinitos, deglutiendo los subproductos indeseables de la actividad humana. Pero, nos volvimos demasiado poderosos. Somos muchos y manejamos energías capaces de alterar equilibrios naturales. El uso racional y el manejo de ecosistemas esta en primera línea desde hace años. Pero para qué y como se maneja un arrecife de coral, todavía esta por verse. A saber, el capitalismo dual, los modelos globales/parroquiales, la evaluación ecológica y el monitoreo, la eliminación de trampas sociales, el cambio de comportamiento humano del dominio a la mayordomo, la transición demográfica, la restauración ecológica, la ética ambiental y la estética, además del giro en los sistemas de producción, en lo que se llama manejo de insumos. Por supuesto, a las famosas tres "R" del código ambientalista (reciclar, reutilizar, reducir) se unen ahora las dos "R" del código ingeniería (restituir, reemplazar) para una visión pragmática de lo que debería ser la ecología contemporánea. La tendencia impuesta por la globalización no es hacia la convergencia sino hacia el aumento de las desigualdades. La globalización contribuye a la degradación ambiental, acentúa la pobreza, la exclusión social y las desigualdades sociales dentro de cada país y entre países industrializados y en desarrollo. El fundamento integrador de la ecología, el hecho que sea la ciencia del ambiente o de las interfaces disciplinarias que tienen que ver con el funcionamiento de los sistemas marinos. Cómo, cuánto y porqué el manejo de los ecosistemas, son preguntas fundamentalmente asociadas al plano de los cientistas sociales, he aquí que lo que antes se conocía como "ecología aplicada" es ahora materia puramente ecológica. La opción esta presente "Ecología" debería ser el puente entre ciencia y sociedad. La Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) informo que en 1989 la flota pesquera total en América Latina ascendía a más de 9.000 embarcaciones (FAO, 1997). Según el análisis más reciente, la flota ha venido aumentando a una tasa anual de un 5 por ciento durante la ultima década. El sector pesquero encara crecientes problemas, entre los que se cuentan el agotamiento de las reservas pesqueras, la sobrecapitalización y el cierre de plantas, la degradación del hábitat, el incumplimiento de los reglamentos de manejo y las practicas ilícitas, así como la competencia cada vez mayor entre las flotas industriales y artesanales. Más del 80 por ciento de las reservas pesqueras comercialmente explotables en el Atlántico suroccidental y el 40 por ciento en el Pacifico suroriental son explotadas al máximo, excesivamente o están agotadas (FAO, 1995). Las aguas frente a las costas del Perú y de Chile una de las cinco pesquerías comerciales más grandes del mundo y, hasta la fecha reciente, frente a las costas de Argentina y Uruguay prosperaban el sector pesquero de más rápida expansión en el mundo. Los efectos de las capturas accidentales sobre la Biodiversidad Marina y la sostenibilidad pesquera constituyen también una preocupación. Dada la dependencia del sector pesquero de América Latina a los mercados de los países industrializados, donde la demanda es fuerte, cabe esperar que la presión sobre las reservas pesqueras continuará aumentando. La capacidad de aplicar las ciencias marinas para manejar los recursos costeros y marinos, las políticas, reglamentos e instituciones destinados al Manejo de las zonas costeras y marinas están rezagados en cuanto a otros aspectos del manejo de los recursos naturales. En muchos casos, este rezago refleja una falta de concientización con respecto al patrimonio costero y marino de la región y a su contribución al bienestar económico nacional. La política pesquera vigente ha sido criticada en varios proyectos de demostración que afirman que no favorece adecuadamente a una pesca Sostenible, sobre todo a: # El sistema de contingentes, no ha conseguido impedir la disminución de las poblaciones de peces porque interviene a posteriori y con frecuencia demasiado tarde, cuando ya se está produciendo el proceso de desaparición. # Las amenazas de la pesca industrial para la biodiversidad marina. # Para potenciar los objetivos de la Gestión Integrada de las Zonas Costeras, la política estructural de la pesca debe articularse mejor con: las demás políticas estructurales (con una perspectiva de cohesión económica y social). A este respecto, hay que poner de manifiesto las dificultades de articulación entre la lógica nacional y regional porque la política estructural de la pesca responde a una lógica nacional de programación sectorial (en particular, las medidas de ajuste estructural de las capacidades pesqueras).
# La política de medio ambiente (con una perspectiva de desarrollo sostenible); la gestión integrada de los ecosistemas marinos requiere una visión más amplia del medio ambiente que la simple incorporación de # La fauna acuática debe ser protegida, para evitar que el abuso y la depredación conviertan a la pesca en una actividad reñida con la naturaleza. # Los fines primordiales son la protección del ecosistema marino en América del Sur, la ayuda económica a la gente afectada por la disminución del recurso y una reestructuración de la flota, deberían ser las metas de un desarrollo sostenible en la región. |
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* Dr. M. Sommer ÖKOTECCUM Kiel-Alemania stu38884@mail.uni-kiel.de |