Respire hondo hoy, mañana podrá ser tarde

Por Miguel Webb

Lo que le exigimos al planeta es excesivo, le estamos pidiendo mas de lo que puede dar: hemos creado una economía de burbuja- cortamos mas árboles de los que se regeneran, sobrepastoreamos las planicies hasta la desertificación, vaciamos los acuíferos y ríos y pescamos de los océanos mas de lo que se reproduce.

No soy ambientalista, ni ecologista, ni conservacionista ni fundamentalista, ni ningún otro "ista" relacionado con el ambiente. Integro el ambiente, soy parte de el, como las ballenas, los cornalitos, perros, gatos, los pajaritos pastos arbustos y árboles, nativos y no tanto. Lo respiro, lo como y lo excreto. Todo bien. Los Tehuelche en sus migraciones dejaban desperdicios y sus excretas a la vera de lo que hoy es la Ruta 40 y no queda rastro alguno de su paso- (convivencia ambiental sustentable), que es más, no quedaron ni ellos.

El Homo sapiens de por sí, no es incompatible con Gaia (Gea)- hermoso nombre con que Lovelock bautizó a nuestro planeta "ser viviente"-, por el tiempo que sea, salvo por el hecho que de nuestra especie surgió una "superespecie" que desde 1945 en un lugar de los EEUU, Bretton Woods, diseñó la globalización económica que succiona la energía vital del Homo comunis periférico hacia un centro global: la superestructura de las Corporaciones Transnacionales.(¿Homo supersapiens?).

Ellos requieren de nosotros la producción de sus materias primas no renovables (petróleo) para la elaboración de chucherías descartables y no degradables que contaminan. Basta ver el tamaño de los envases de plástico de pequeños juguetes, también de plástico, que recibimos del Norte, para ver como nuestras materias primas no renovables vuelven como chatarra perdurable.

En los últimos 50 años se ha duplicado la población y septuplicado la economía global. ¿Estamos todos 3,5 veces mejor? Para nada. Algunos pocos están setecientas veces mejor y la mayoría peor. Lo que le exigimos al planeta es excesivo, le estamos pidiendo mas de lo que puede dar: hemos creado una economía de burbuja- cortamos mas árboles de los que se regeneran, sobrepastoreamos las planicies hasta la desertificación, vaciamos los acuíferos y ríos y pescamos de los océanos mas de lo que se reproduce.

Liberamos mas anhídrido carbónico a la atmósfera de lo que la naturaleza pueda absorber, creando un efecto invernadero. A medida que aumenta la CO2, lo hace también la temperatura. Este incremento es tan brusco que se están perdiendo especies de plantas y animales a un ritmo superior de lo que pueden evolucionar, poniéndonos en vísperas de la sexta extinción masiva, la primera desde el chau de los dinosaurios hace 65 millones de años

La futura instalación en nuestra ciudad , Comodoro Rivadavia, de un horno pirolítico es todo un símbolo. Producimos tanto desperdicio que ya no encontramos donde ponerlo. Con un pensamiento muy infantil, lo quemamos y "no tá má ".
Un hospital o sanatorio produce dos tipos de excrementos. En realidad son tres, pero uno de ellos va por las cañerías cloacales directamente al mar y no lo vemos. Los otros dos son los residuos biopatogénicos (20%) (sangre, órganos y materiales impregnados con fluidos humanos), que se presumen que además de asquerosos pueden ser infectantes a la población, y la basura doméstica del hospital (80%) (papeles, jeringas, agujas, tubuladuras, frascos de suero, sondas, bolsas de colostomía, envoltorios de materiales estériles, bolsas de polietileno, pilas , bolígrafos, piernas ortopédicas y dientes postizos etc.) mucho mas abundante que el rubro asqueroso. Ambientalmente hablando, también mas peligroso.

Al fin y al cabo, en Comodoro Rivadavia todos los meses vertimos unas 5 toneladas de sangre menstrual al ambiente, un 5% infectado con hepatitis B y otro 0,5% con HIV. No es un golpe bajo de efecto, es que suele ocurrir que las excretas de los ricos va a parar al ambiente de los pobres conformando una combinación terrible: pobreza y contaminación. Nuestros pobres, los de nuestra ciudad, frecuentemente comen donde van nuestras excretas. (Basural y playa del 99).

Este dato lo doy con el solo objeto de no tomar la actitud mas frecuente de "ojo que no vé, corazón que no siente", barriendo la tierra abajo de la alfombra.

La mayor parte de los residuos biopatogénicos son al mismo tiempo biodegradables, con lo que no existiría riesgo en taparlos con tierra en un lugar apropiado- ¿acaso no lo hacemos con nuestros muertos?
El resto del material del hospital sí constituyen un problema serio.

  • ¿Podrían evitarse, esterilizarse, y reciclarse? – Deberían.
  • ¿Podrían incinerarse?- Y …es tentador.
  • ¿ Deberían incinerarse? Jamás.

La gran tentación es quemarlos, y esto traería una contaminación invisible de dioxinas cancerígenas. Estas sustancias productos del PVC incinerado se almacenan en las grasas del cuerpo, nuestro y de los animales que comemos o tomamos su leche. Se encuentran asociadas con distintos tipos de cánceres humanos y afecciones en el desarrollo fetal. Por mas que la Ing. Owen, (Directora de Ambiente del Chubut) asegura que este horno no elimina dioxinas (temperaturas superiores a los 1100°C),¿Quién verifica a U$S 1000 (mil) la muestra, (en EEUU),que estas cosas no salen por la chimenea porque para ahorrar gas lo hagan funcionar a 900°C.? Dice también que no van a incinerar plásticos.

En la audiencia pública que se realizó como parte del Estudio de Impacto Ambiental del proyecto, hubo varias objeciones que ni siquiera fueron observadas en la aprobación final. Las de Javier Rodríguez Pardo, que además quiso presentar y no le permitieron, una alternativa mas moderna para resolver el problema, y las mías que solicitaban la incorporación de un manual de procedimiento y la descripción de la gestión de los residuos.

Los hospitales son además la fuente de contaminación ambiental más importantes de mercurio, (termómetros, antisépticos- timerosal, mercurocromo etc.) La incineración de estos materiales vaporizaría el mercurio al ambiente, fundamentalmente al medio marino. El EIA, no había considerado esto " porque se encontraba lejos".. a 500 metros. La contaminación mercurial en los océanos es de tal magnitud que recientemente se ha debido tomar la decisión en EEUU de recomendar a las embarazadas no ingerir carne de atún por su alto contenido. El mercurio produce malformaciones graves del sistema nervioso central del feto.

Nuestro Concejo Deliberante, tampoco consultó a los ciudadanos que objetaron el proyecto.

El Profesor Cabezas alguna vez me dijo:" Yo no soy fundamentalista, ni ambientalista; soy LEGALISTA, las leyes que me competen las debo hacer cumplir".

No se cumple la Ley 4032 de Impacto Ambiental, ni en este caso, ni tampoco en las plantaciones de cerezas de Sarmiento con el uso de Paraquat como herbicida en la cuenca del agua que tomamos, ni en la cría de mejillones en Camarones o Bahía Bustamante, ni en la mina de oro El Desquite de Esquel. Pero esto puede ser tema para otro día.

Respire hondo hoy, mañana podrá ser tarde.

*Por Miguel Webb.
Pediatra, Candidato a Senador Nacional por La Corriente Chubutense
( www.corrientechubutense.com.ar )