Transgénicos, pobreza y desastre ecológico

Se estima que más de 125.000 campesinos se han quitado la vida como consecuencia de la despiadada campaña que ha convertido a India en un campo de pruebas de los cultivos genéticamente modificados. Estas muertes están relacionadas con el endeudamiento con las grandes multinacionales y la imposibilidad de pagar la factura del agua empleada para regar el algodón. Las cifras oficiales del Ministerio Indio de Agricultura confirman que más de 1000 campesinos se quitan la vida cada mes

El genocidio de los transgénicos. Miles de campesinos indios se suicidan tras utilizar cultivos genéticamente modificados

En un pueblecito que visité, 18 campesinos se habían suicidado después de que se los tragaran las deudas de los GM. Lejos de ser unas “semillas mágicas”, las variedades de plantas de algodón GM a prueba de pestes han sido desvastadas por unos gusanos que atacan los capullos y que son un parásito voraz. Tampoco les dijeron a los campesinos que esas semillas requerirían el doble de riego. Y esto ha acabado siendo una cuestión de vida o muerte.