Los edulcorantes artificiales pueden aumentar el riesgo de ataque cardíaco
Los edulcorantes artificiales se han convertido en un reemplazo popular del azúcar, pero tienen el potencial de causar problemas de salud. Si bien agregan … Leer Más
Los edulcorantes artificiales se han convertido en un reemplazo popular del azúcar, pero tienen el potencial de causar problemas de salud. Si bien agregan … Leer Más
Los alimentos vienen con letra chica y nosotros nos ponemos los anteojos para saber qué es eso que entra en nuestro cuerpo cuando abrimos la boca. Hoy: jugo en polvo.
Hay quien afirma que hay que “comer sin miedo”, que nunca en la historia de la humanidad la producción de alimentos había sido tan segura. Y es innegable el alto número de controles por los que pasa la comida en la actualidad. Sin embargo, periódicamente aparecen nuevos escándalos alimentarios, emergen enfermedades vinculadas a aquello que consumimos, vemos cómo aditivos que ayer se admitían hoy están prohibidos. ¿Nos podemos permitir comer sin miedo? Opino que no.
Cada año aumentan los casos de personas que mueren por los malos hábitos alimenticios, que incluyen el consumo excesivo de la Coca Cola y demás bebidas gaseosas, siendo una enfermedad predominante a escala global que no discrimina la edad, el peso y la adicción conllevada por los hipnotizados consumidores, quienes nunca se cansan de comprar e ingerir diariamente los nocivos refrescos en la calle, en el hogar y en la oficina.
La mejor manera de perder peso es comer una dieta saludable de comida real y evitar ingredientes sintéticos, mientras aumenta sus niveles de actividad
Gracias por compartir felicidad”, nos dice el último anuncio de Coca-Cola, pero mirando de cerca parece que Coca-Cola de felicidad más bien reparte poca. O sino que se lo pregunten a los trabajadores de las plantas que la multinacional pretende cerrar ahora en el Estado español o a los sindicalistas perseguidos, y algunos incluso secuestrados y torturados, en Colombia, Turquía, Pakistán, Rusia, Nicaragua o a las comunidades de la India que se han quedado sin agua tras el paso de la compañía. Por no hablar de la pésima calidad de sus ingredientes y el impacto en nuestra salud.
Aunque parezca que el GMS es una banda de comunicación de teléfonos celulares, no es tal cosa. Lo que sí es, es una substancia química que se le ha agregado indiscriminadamente en los alimentos procesados sin la debida reglamentación ni estudios que avale su seguridad. Es gracias a este producto que México vive una tragedia humana en carne y hueso donde sus habitantes ahora rompen la marca de ser los más obesos en el mundo y tener elevados niveles de diabetes infantil.
Entre las muchas estrellas surgidas en el firmamento de las multinacionales químicas y farmacéuticas, que en muchos de los casos cometen un artero ataque contra la salud, aparecieron hace algunos años cierto tipo de endulzantes artificiales para reemplazar el uso del azúcar, más conocidos como edulcorantes.