La fantasía de los biocombustibles

La poca legitimidad que le quedaba a la Revolución Verde recibió el golpe de gracia con la publicación del informe IAASTD, un estudio de cuatro años de la agricultura mundial patrocinado por agencias de la ONU y el Banco Mundial. El informe IAASTD, endosado por 58 gobiernos, advierte que la agricultura industrial ha degradado los recursos naturales de los cuales depende nuestra supervivencia, amenaza los recursos de agua y energía y entorpece los esfuerzos por combatir el calentamiento global. Es muy triste ver algunos ambientalistas acudiendo al modelo obsoleto y destructivo de la revolución verde, ignorando todas las críticas que se le han hecho, y para colmo en nombre de combatir el cambio climático.

Biotecnología y Bioseguridad

Las nuevas tecnologías a menudo tienen gran potencial y prometen mucho, pero también deben ser evaluadas adecuadamente para asegurar que son seguras, al igual que ambientalmente y socialmente sustentables. La ingeniería genética y los organismos genéticamente modificados son ejemplos en los que, a pesar de promesas y expectativas de beneficios, perduran las preocupaciones sobre riesgos potenciales a la salud humana y el ambiente. Además, hay muchas cuestiones socioeconómicas que deben ser consideradas, particularmente en países en vías de desarrollo. – Martin Khor, Red del Tercer Mundo

Cuidado con los transgénicos

El gobierno de Puerto Rico le apuesta a la biotecnología como salida a la debacle económica que sufre el país, como lo evidencia la vistosa y onerosa campaña, titulada de modo rimbombante “la bioisla”. Debido a la política de sucesivos gobernantes nuestro territorio se ha convertido en uno de los lugares favoritos de la industria biotecnológica para sembrar cultivos transgénicos (genéticamente modificados) experimentales al aire libre y para propagar semilla transgénica comercial (mayormente maíz y soya en fincas en el sur y oeste de Puerto Rico).

La biotecnología le apuesta a los agrocombustibles

Hay un nuevo partícipe en las deliberaciones internacionales en torno al calentamiento global y los agrocombustibles: la industria de la biotecnología. Los gigantes corporativos de la genética proponen nuevas tecnologías, como árboles transgénicos, etanol celulósico de segunda generación y biología sintética, para sacar a la sociedad de su dependencia de los combustibles fósiles y combatir el cambio climático.

Perdiendo el bosque entre tanto árbol: Monocultivos forestales y el boom de los agrocombustibles

El uso de árboles para hacer combustible como parte del boom de los agrocombustibles significa el cultivo de plantaciones masivas de monocultivo de árboles. Ya existen en Chile, Uruguay y Brasil para suplir madera al igual que pulpa de papel, y por su destrucción de la biodiversidad este modelo ha encontrado la oposición de grupos de sociedad civil y pueblos indígenas, cuyo sustento está en juego.

El mundo según Al Gore

Las falsas soluciones que propone Gore no atienden para nada las causas de fondo del cambio climático, que surgen de relaciones económicas y geopolíticas que favorecen a minorías privilegiadas a costa del resto del mundo. Mejor aprendamos de muchos pueblos tradicionales e indígenas, quienes a cambio de nada y prácticamente sin recibir agradecimiento de nadie, lo dan todo en su lucha por detener la expansión de la extracción petrolera. Eso sí es proteger el ambiente.

Biotecnología y “economía del conocimiento”

El desarrollo de la biotecnología (sin reserva ni precaución alguna) es política pública del gobierno de Puerto Rico. Se repite la historia del boom farmacéutico, con su saldo de basura tóxica; las petroquímicas, un sector igualmente tóxico ahora llegado a menos; y la minería a cielo abierto —que afortunadamente nunca tomó lugar. Puerto Rico está siendo usado como semillero comercial y laboratorio de cultivos genéticamente alterados, también llamados transgénicos.

Biotecnología en Puerto Rico: Mitos y peligros

La biotecnología se ha puesto en boga y el gobierno de Puerto Rico le apuesta a ella como salida a la debacle económica que sufre el país. Una vez más, en alianza con intereses empresariales locales y extranjeros, se embarca en una ruta de desarrollo económico y tecnológico sin indagar para nada los posibles costos sociales y ecológicos y los impactos a largo plazo.

Hacia el mundo nanotecnológico

Imagínese robots diminutos, navegando por su flujo sanguíneo, matando microbios dañinos y células cancerosas; imagíneselos ahora fuera de su cuerpo fabricando, átomo por átomo, productos más versátiles, resistentes y duraderos que cualquier cosa conocida hoy día; imagine que la tecnología en que se basan estos robots revoluciona de manera drástica y sin precedentes los campos de la manufactura. Bienvenidos al mundo de la nanotecnología.

Al Gore: de político a estrella de cine

Personalmente, yo no apoyo el Protocolo de Kyoto y creo que los ambientalistas que lo apoyan están en un serio error. El Protocolo compromete 38 países industrializados firmantes a reducir sus emisiones a 5.2% debajo de los niveles emitidos en 1990. Pero tales reducciones son insignificantes frente a lo que se necesita hacer para evitar una catástrofe climática planetaria.

Guisantes australianos y papas asesinas

Un informe secreto de la compañía de biotecnología Monsanto sobre su maíz transgénico Mon 863, de 1,139 páginas, ratas alimentadas con este maíz por trece semanas tuvieron conteos anormalmente altos de células blancas y linfocitos en la sangre, los cuales aumentan en casos de cáncer, envenenamiento o infección; bajos números de reticulocitos (indicio de anemia); pérdida de peso en los riñones (lo cual indica problemas con la presión arterial); necrosis del hígado; niveles elevados de azúcar en la sangre (posiblemente diabetes); y otros síntomas adversos.