El Chaco perdió más de 4 millones de hectáreas de bosques en los últimos 15 años
Casi el 90% de la deforestación ocurrida en Paraguay se registra en el Chaco y está asociada al avance de la frontera agropecuaria. … Leer Más
Casi el 90% de la deforestación ocurrida en Paraguay se registra en el Chaco y está asociada al avance de la frontera agropecuaria. … Leer Más
La Justicia chaqueña ordenó el cese de la desforestación hasta que se realice un nuevo ordenamiento territorial. Pero las topadoras avanzan sobre el … Leer Más
La organización ecologista Greenpeace denunció ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación que los desmontes aumentaron durante el período de cuarentena … Leer Más
La organización ambientalista Greenpeace reveló que por la deforestación, durante 2019, se perdieron 80.938 hectáreas de bosques en el norte argentino. • Durante … Leer Más
El pasado viernes 25 de agosto quedó oficialmente inaugurado el Parque Nacional El Impenetrable en la provincia del Chaco, reserva natural de la Argentina considerada patrimonio nacional por su extensión y su gran biodiversidad.
Según los datos de la Asociación Guyra Paraguay, en el norte argentino se desmontaron 7.763 hectáreas (ha) durante el mes de octubre de 2014. Los datos corresponden a un relevamiento satelital mensual del Gran Chaco Americano.
La importante sequía, está llevando a las autoridades de pueblos y ciudades de Chaco y Formosa, a “echarle mano” al Bermejo. Hay diversos proyectos y ejecuciones. Todos estos emprendimientos, están basados en sacarle agua al declinante río.
Informes oficiales y de investigadores explicitan el saqueo del monte nativo. En Argentina se arrasan 36 canchas de fútbol por hora. El impacto ambiental y social del desmonte.
Un fallo de segunda instancia de la Justicia de Chaco confirma prohibiciones inéditas para las fumigaciones y protege los cursos de agua. La causa se inició en La Leonesa, una localidad de diez mil habitantes a 60 kilómetros de Resistencia. La Justicia también hizo valer el principio precautorio (ante la posibilidad de perjuicio ambiental irremediable, es necesario tomar medidas protectoras) y remarcó que se debe dar prioridad a la salud de la población por sobre la producción agropecuaria.
Cada cierto tiempo se repite, y no queda saldado, el debate sobre el uso de químicos y sobre todo agroquímicos, asociados a los cultivos que utilizan siembra directa, particularmente la soja, el maíz y el arroz, entre otros, que someten al suelo a grandes desgastes y finalmente se cuestiona el grado de contaminación o envenenamiento de personas, vegetales, animales y cursos de agua. El caso de la arrocera de La Leonesa-Las Palmas es, solamente, un caso testigo que ha tomado repercusión por la movilización de sus vecinos. Carta Abierta: Comisión de Salud y Medio Ambiente.
La idea aquí es discutir una faceta de la crisis, hasta ahora no mencionada por los medios: el drama que viven los pueblos indígenas de los departamentos separatistas, que pueden ser los verdaderos perdedores de esta contienda. Se trata de más de 30 pueblos indígenas del Chaco y Amazonia, que despojados de sus tierras y recursos fueron sometidos durante siglos a una servidumbre inhumana.
Un estudio realizado por el Centro de Estudios Nelson Mandela informa que en las comunidades indígenas del Impenetrable persiste la pobreza extrema y el hambre. Ahora se agregó también el hambre mojado, que directamente se vincula con las inundaciones que se produjeron en la región, producto de las intensas lluvias y el aumento del caudal de los Ríos Bermejito y Teuco.
Argentina se posiciona como el tercer productor mundial de soja transgénica después de Brasil y Estados Unidos. Este año, la soja batió nuevos records de cosechas. Al mismo tiempo se conoció la muerte de por lo menos 14 indígenas por desnutrición en el norte del país. Paradójicamente, son estas provincias norteñas las que en los últimos 10 años percibieron un mayor avance del monocultivo de la soja. Hambre, exclusión y devastación, los pilares del modelo de la soja.
El Estado Argentino permite a capitalistas inescrupulosos en la provincia del Chaco y en muchas otras, incurrir en deforestaciones desmesuradas e irreversibles que son prácticamente la condena a muerte de los aborígenes, que viven de los montes y sus frutos, con la deforestación se secan sus ríos, se elimina la fauna, por día se desforestan miles de hectáreas.
La Federación Agraria Argentina confirma que unos 300.000 kilómetros cuadrados –el 10% del territorio nacional- están en manos de inversores extranjeros, que “se han beneficiado de la actitud flexible de los diferentes gobiernos nacionales y provinciales para adquirir millones de hectáreas y recursos no renovables, sin restricciones y a precios módicos”.
El Chaco es una provincia que agoniza en sus ecosistemas devastados. Una provincia que agoniza asimismo bajo la tiranía corrupta de una corporación política tan, pero tan inepta, que contra toda lógica, deja extinguir el propio territorio y la propia población a la que desde hace décadas explota sin misericordia.