Adiós a la energía nuclear

El cambio climático y el final del petróleo barato habían venido como anillo al dedo a los partidarios de la opción eléctrica nuclear. Mantenían que ésta era limpia, no emitía CO2, era más barata que la solar y, con las nuevas maneras, bastante segura. Se anunciaba ya una nueva era de renacimiento nuclear. Pero Fukushima ha venido a estropear la fiesta a los pronucleares. En este articulo se demuestra que no es limpia, sí emite CO2, es inconmensurablemente cara, peligrosa y militarista, e implica altisimos riesgos para la salud y el medio ambiente.

El aviso de Fukushima

Seguramente en su noticiero preferido la tragedia nuclear se ha reducido en espacio y tiempo, aunque la amenaza radioactiva no ha menguado y sigue surcando vientos y océanos sin entender de patrias, lenguas y banderas. La radiación aumenta fuera de la zona de exclusión, aparece en alimentos y atraviesa el Pacífico para esconderse en la leche estadounidense… aunque inocuamente según dicen.

Fukushima: un escenario apocalíptico

Si las barras de combustible nuclear ya utilizado arden debido a la falta de refrigeración, el intenso calor producido va a alzar la radiación hasta altas capas de la atmósfera, esparciéndola a lo largo de todo el planeta. Ese es el peor escenario posible, una pesadilla de nubes de material radioactivo inundando durante meses el planeta con toxinas letales para todo tipo de vida.

Hungría: ¿un nuevo desastre ambiental para pasar de largo?

La ruptura de uno de los muros de una piscina con desechos de una planta productora de aluminio ubicada en Ajka, Hungría, liberó más de un millón de metros cúbicos de barro rojo, tóxico que se caracteriza por ser corrosivo y altamente contaminante por su alcalinidad. La obtención del aluminio se realiza usando soda cáustica (NaOH) para obtener un compuesto soluble que se pueda separar del resto de los componentes. Esta solución tiene un pH de 14, es decir, que está en el máximo posible en la naturaleza. Como la vida se desarrolla en condiciones naturales a un pH que ronda el 7, un grado de 12 puede arrasar todo lo que encuentre.

Derrame British Petroleum. Chernobil de Estados Unidos

BP ha provocado, con el imparable derrame de hidrocarburos en el Golfo de México, un caos ambiental, social, económico y político. Michio Kaku, el prestigioso físico teórico estadounidense ha declarado que "el vertido de petróleo podría durar años si los pozos de alivio que está perforando BP fallan. En este caso habrán zonas muertas en el Golfo de México que durarán por mucho tiempo". Hayward (BP) nos clarifica sobre las enseñanzas que sacó del siniestro: “Con cada gran derrame, aprendemos más como industria”… “Confío en que aprenderemos de estos terribles eventos y la industria saldrá de esto más fuerte, inteligente y segura que antes.” ¿La vida en el planeta sobrevivirá a este destructivo proceso de aprendizaje de las petroleras?