El puente que se come la contaminación

Un puente que descompone y devora con rapidez mugre, moho, hollín, aceite y humo de cigarrillo gracias a los rayos ultravioleta ¿Acto de magia? No. Se trata de una reacción química que al aprovecharse en ciertos materiales, como el concreto, permite mitigar la polución ambiental.

El río se defiende, el río no se rinde…

Un homenaje al río Manutata, Amarumayu, Madre de Dios… el puente Billinghurst, con fisuras y paralizado. Que el primer gran puente sobre un río mayor de la Amazonía Sur, se fisure y deba ser desmontando es un símbolo de la resistencia que la naturaleza y sus defensores –para empezar, los hermanos indios de la zona de influencia del río- oponen a esos planes de penetración del capital a las selvas sudamericanas, planes que como ya denunciamos sólo significan el principio del fin de los bosques y la consumación del acto final del genocidio que persigue desde hace cinco siglos a los pueblos indígenas de la Amazonía.

IIRSA y los pueblos indígenas aislados y vulnerables. El Puente Billinghurst y la Interoceánica: punto de no retorno para el genocidio y la devastación de la Amazonía

Cuando se terminen las obras de construcción del puente Billinghurst sobre el río Madre de Dios y con ello se culmine la construcción del llamado Corredor Vial Interoceánico Sur Perú-Brasil, la historia sudamericana cambiará para siempre. Finalmente, el más vasto plan de recolonización capitalista de Sudamérica, de asalto a sus recursos naturales al servicio de las trasnacionales y el empresariado podrá exhibir una anhelada y primera gran victoria sobre la geografía, la naturaleza y los pueblos, inaugurando por primera vez en la historia una carretera de más de 5000 kilómetros con puentes que aguantan hasta 60 toneladas de peso y que permitirán el flujo permanente de inversiones y mercancías de un océano a otro, y la consecuente apertura irreversible del espacio amazónico al mercado mundial.