Casi todos conocemos la hierba aromática albahaca, oriunda del mediterráneo, por sus propiedades culinarias. Pero existe una variedad índica, pariente de la albahaca común, menos conocida y con propiedades medicinales que la hacen muy especial.
Se trata de la albahaca morada (Ocimum sanctum), también conocida como tulsi, que en sánscrito significa incomparable. También se la conoce como albahaca sagrada o albahaca santa.
Es originaria de las regiones tropicales de Asia, y ya se ha extendido por todo el mundo al ser cultivada por sus extraordinarios valores curativos. Tiene una gran tradición de uso en la medicina ayurvédica dado que alivia la fiebre, la bronquitis, el asma, el estrés y las úlceras bucales.
El origen de su nombre “albahaca sagrada” deriva del hinduismo, esta planta es venerada como la encarnación de Lakshimi, la esposa de Vishnu. Y tanto en la antigua Grecia como en Roma, fue una planta muy apreciada por sus médicos.
Como se compone la Tulsi
Los compuestos fitoquímicos de la albahaca sagrada son el eugenol, derivado fenólico conocido comúnmente como esencia de clavo, el ácido urosólico, el carvacrol, linalool, cariofileno y metil carvicol, todos ellos compuestos que tienen propiedades y efectos antiinflamatorios, antidiabéticos, antiulcerosos, anticancerígenos, y antimicrobianos.
Además, cuenta con componentes nutricionales como vitamina A, C, y K, y minerales como calcio, fósforo, conteniendo 287 mg por cado 100 gramos, zinc, hierro, manganeso, así como fitonutrientes antioxidantes como la clorofila.
Propiedades medicinales de la Tulsi
Las propiedades medicinales de la albahaca morada son amplias, teniendo acción antidiabética, ya que tiene efecto regulador de la cantidad de azúcar en sangre, disminuyendo los niveles de glucosa y hemoglobina glicosilada en sangre, con efectos estimuladores de la secreción de insulina.
Mejora la actividad cardíaca y fortalece el sistema cardiovascular. Reduce los niveles de colesterol sérico, triglicéridos, fosfolípidos y colesterol LDL, aumentando los valores del colesterol HDL.
Es una planta antiséptica, presenta acción antinflamatoria y cicatrizante de heridas.
Tiene acción antioxidante debido a que sus compuestos químicos reducen los radicales libres incrementando los niveles de enzimas antioxidantes como superóxido dismutasa y catalasa.
Tiene efecto inmunoestimulante, aumentando la capacidad del sistema inmunológico de proteger al organismo frente a patógenos, y a través de los resultados de pruebas médicas llevadas a cabo en laboratorio, se conoce que tiene capacidad anticancerígena demostrada frente a tumores de piel.
Por Raúl Martínez, Dietista-nutricionista, biólogo.
Ecoportal.net