Las dos economías más importantes del planeta, tras meses de tensiones, Estados Unidos y China pactaron un cese parcial en la aplicación de aranceles recíprocos, dando lugar a una tregua inicial de 90 días que, si bien no resuelve de fondo el conflicto, abre una ventana para el diálogo.
El anuncio de este nuevo panorama se dio el 12 de mayo desde Ginebra, donde funcionarios de alto nivel de ambos países mantuvieron conversaciones durante un intenso fin de semana. Según lo informado, Estados Unidos reducirá del 145% al 30% las tarifas impuestas a productos chinos.
Mientras que China recortará los aranceles sobre mercancías estadounidenses del 125% al 10%, esto fue confirmado por el Representante Comercial de EE.UU, Jamieson Greer, y el secretario del Tesoro, Scott Bessent, en una rueda de prensa conjunta, ellos destacaron el compromiso de ambas naciones de evitar una ruptura total ya que manejan cerca de 600 000 millones de dólares en comercio bilateral.
Los equipos económicos de China y EE.UU continúan negociando
En los 90 días de la tregua, los equipos económicos de estas naciones reconocen que la guerra arancelaria afectó gravemente a sus respectivas economías, interrumpiendo cadenas de suministro, elevando los precios e incluso provocando despidos en algunos sectores importantes.
Así fue como Bessent indicó que las tarifas elevadas representaban “un embargo de facto” e hizo hincapié en que ni Washington ni Pekín desean una desvinculación económica total e insistió con que el objetivo común es alcanzar un comercio más equilibrado y sostenible, pero las próximas conversaciones se centrarán en sectores estratégicos como semiconductores, fármacos y acero.
Donald Trump, sostuvo que el acuerdo no incluye productos sensibles como automóviles o aluminio, además señaló que mantiene abiertas las opciones para seguir presionando si las negociaciones no avanzan e indicó que la relación con el país asiático es “muy buena” y anticipó una posible charla con el presidente Xi Jinping.
Tregua comercial y su impacto en los mercados financieros
Ante la tregua comercial, las principales bolsas registraron subidas pronunciadas tras el anuncio, y el dólar mostró un fortalecimiento sostenido debido a que este alivio también se reflejó en los índices de riesgo, que habían aumentado tras la última ofensiva arancelaria de Estados Unidos en abril.
Según los analistas como es el caso de Zhiwei Zhang, economista jefe en Pinpoint Asset Management, confesó estar sorprendido ya que creía que “los aranceles se reducirán al 50%, pero este resultado es mucho mejor” en el marco de una retórica combativa.
Cabe mencionar que las negociaciones en Suiza remarcan el primer contacto presencial de alto nivel desde el regreso de Trump a la Casa Blanca sobre todo con China. También, Greer aclaró que el arancel del 20% aplicado a productos chinos vinculados al fentanilo sigue vigente, aunque se están llevando negociaciones positivas sobre el tema.
China cree que logra plantarse frente ante la presión de Washington
Desde la óptica de Beijing, logró defender su posición ante la presión de Washington y obtuvo una reducción de los aranceles sin ceder en temas importantes, fueron algunos expertos los que indicaron que este desenlace fue una victoria estratégica para el gobierno chino.
Por el lado de Estados Unidos continuaron desarrollando su estrategia comercial con otros actores, como lo demuestra el acuerdo con el Reino Unido. Como mencionamos, los mercados reaccionaron con favorablemente al anuncio son subidas destacadas en bolsas internacionales incluyendo un aumento del 3 % en el índice Hang Seng y más del 2 % en los futuros estadounidenses.
Si bien hubo un freno en los aranceles por 90 días, las partes deberán seguir las negociaciones para transformar esta tregua temporal en un pacto más duradero sobre todo si todavía siguen los aranceles impuestos por el primer mandato del republicano que todavía superan el 145 % en ciertos sectores.