Durante las últimas semanas del mes de abril comenzó a resonar muy fuerte el rumor de que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) empezaría a cobrar impuestos a todo tipo de depósitos en efectivo que realicen los contribuyentes mexicanos.
De acuerdo con esta información, autoridades del organismo fiscal, salieron a desmentir la posibilidad de cobro de impuestos a cualquier tipo de depósitos que se realicen, confirmando que se trata de un malentendido o de una fake news, es decir, de una noticia falsa.
Si bien, muchos ciudadanos saben que no deberían realizar depósitos bancarios que superen el monto de $15 000 pesos mexicanos, para no tener inconvenientes fiscales con el SAT. Pero esto no quiere decir que la autoridad fiscal va a revisar y controlar minuciosamente todos los movimientos que realicen los contribuyentes.
No obstante, el ente fiscal ratificó su compromiso de llevar correctamente política fiscal y tributaria a todo el territorio mexicano. De acuerdo con esto, confirmó que su propósito principal es no aumentar la cantidad de impuesto y cobrar de manera justa y más equitativa.
Cobro de impuestos a depósitos en efectivo: ¿real o fake news?
La información de que el SAT cobrará impuestos por aquellos depósitos en efectivo es puro cuento. Sin embargo, surgió de la iniciativa que impulsó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la cuál se refería a que las entidades bancarias brinden información relacionada a este tipo de movimientos.
No obstante, el SAT señaló que esta iniciativa busca que las instituciones bancarias brinden información financiera cada mes sobre aquellos usuarios que estén bajo la mira del SAT, es decir, aquellas personas que se encuentren en algún proceso de auditoría, revisión o fiscalización por parte del fisco.
De acuerdo con esto, al detectar irregularidades entre los ingresos y los gastos de los contribuyentes, la autoridad fiscal podría solicitar datos confidenciales de las operaciones en dichas instituciones financieras. Todo esto con el fin de eliminar y evitar los fraudes y evasiones fiscales.
¿Qué depósitos activa las alarmas del ente fiscal?
Según anunciaron, las entidades financieras deberán informar ante el SAT cualquier transacción en efectivo que sea mayor a $15 000 pesos. Esta normativa esta bajo el respaldo de la Regulación Miscelánea Fiscal, que se encuentra vigente desde el 2021.
Aunque esta norma no impide específicamente que se lleven a cabo transferencias por montos altos, si puntualiza que estas operaciones tienen que ser avisadas ante el ente fiscal. Esta propuesta tiene como fin detectar irregularidades entre lo que los usuarios declaran y el dinero que efectivamente tienen.
No obstante, el monto establecido es una simple referencia para el fisco, ya que monitorea y analiza cada movimientos sospechoso en los extractos bancarios de los ciudadanos. Con respecto a esto, el fisco ratificó que el problema no son los montos, sino que su origen.
¿Cómo justificar los montos y evitar las sanciones del SAT?
Cuando vamos recibir plata en nuestras cuentas bancarias, la segunda reacción, luego de alegrarnos, debería ser notificar dicho depósito ante el SAT, ya que justificar este tipo de operaciones es primordial para evitar sanciones y problemas fiscales.
Sin embargo, una transferencia bancaria bien justificada, se considera cuando existen documentos que la respalden y con ellos se compruebe el origen de esos fondos. Por este motivo, te recomendamos leer atentamente las siguientes recomendaciones:
- Conservar en un lugar seguro los contratos, recibos y documentos que comprueben de dónde viene el dinero.
- Controlar que las operaciones fiscales estén justificadas y declaradas con éxito.
- Verificar usualmente los movimientos bancarios y la cantidad de efectivo declarado.
Asimismo, cuando este tipo de operaciones se llevan a cabo con frecuencia, los usuarios pueden tener en sus cajas de ahorro mucho dinero sin tener que enfrentarse a las autorías del ente fiscal. Sin embargo, esta tranquilidad la pueden tener aquellas personas que sean ordenadas y lleven al pie de la letra sus operaciones fiscales.