Tras el anuncio del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) de cerrar de manera temporal la frontera norte a las exportaciones de ganado en pie, esta determinación fue motivada por brotes del gusano barrenador detectados en estados como Oaxaca y Veracruz, implica pérdidas diarias estimadas en 11,4 millones de dólares.
Desde el Consejo Nacional Agropecuario (CNA), este cierre afecta en un principio a productores de Chihuahua y Sonora, quienes movilizaron en lo diario más de 5.000 cabezas de ganado hacia el norte. El brote, causado por una larva de mosca que ataca heridas abiertas en animales, pone en riesgo el estatus sanitario que México mantenía desde 1991.
Bajo este aspecto, pese a la implementación de protocolos validados por organismos sanitarios binacionales como Senasica y APHIS, la medida estadounidense fue calificada como “injusta” por el gobierno mexicano. Así, la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que se aplican acciones inmediatas para contener el avance de la plaga.
Los ganaderos mexicanos exigen sellar la frontera sur
Luego de que Estados Unidos frene impuestos, los productores mexicanos, organizados a través de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG), solicitaron al gobierno federal tomar medidas inmediatas como cerrar la frontera sur al paso de ganado proveniente de Centroamérica, siendo un posible lugar de contagio.
En el marco de una reunión virtual con el secretario de Agricultura, Julio Berdegué, los productores expusieron un plan de ocho puntos, que busca reforzar la presencia de la Secretaría de Seguridad Pública Federal en la frontera sur y establecer un mayor control sobre el tránsito de animales entre estados.
Hasta el momento, la regionalización de la frontera norte figura como prioridad, con restricciones para movilizar ganado hacia exportadores como Tamaulipas, Coahuila, Durango y Nuevo León. El presidente de la CNOG, Homero García de la Llata, fue claro al señalar que el cierre parcial del norte no será suficiente si no se contienen los focos de infección en el sur del país.
Se pide tomar medidas sanitarias: revisar a los animales
Dentro del plan de contención, los ganaderos indicaron el incremento de recursos públicos para poder darle fin a la plaga, así como acelerar la instalación de una planta productora de moscas estériles en Metapa, Chiapas.
Al realizar esta estrategia busca interrumpir el ciclo reproductivo del gusano barrenador, utilizando la tecnología probada en otras regiones afectadas con anterioridad, entonces pidieron revisar de forma exhaustiva los animales al momento de llegar a los centros de engorda.
A través de personal calificado del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), en ese aspecto consideraron importante seguir con la capacitación a productores en la detección de heridas y aplicación de tratamientos, para poder prevenir nuevas infestaciones.
Ganaderos proponen un paquete de medidas para frenar al gusano barrenador
Una de las medidas indica bloquear el ingreso de animales sin control sanitario por la frontera sur, para lo cual solicitaron mayor presencia de la Secretaría de Seguridad Pública Federal en esa zona. También pidieron que se les dé voz y voto en el Comité Binacional México- Estados Unidos.
En este sentido, una de las solicitudes centrales era regionalizar la frontera norte, limitando el traslado de ganado hacia entidades autorizadas para exportar (Gusano barrenador pone en jaque exportaciones). Sin embargo, también plantearon instalar una planta de producción de moscas estériles en el sur del país, como herramienta biológica para cortar el ciclo del parásito.
Bajo este aspecto, exigieron un aumento importante en los recursos federales destinados a enfrentar esta emergencia sanitaria, además proponen que los gobiernos estatales y los comités ganaderos se involucren, proponen que el personal del Senasica inspeccione cada embarque al llegar a los centros de engorda.