El Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP) llevó a cabo su primera subasta electrónica de este sexenio, generando gran interés ciudadano por la amplia variedad de bienes ofertados, miles de personas se registraron para participar, desde coleccionistas hasta compradores interesados en artículos de uso cotidiano, la alta expectativa y el evento dejó en claro que estos procesos pueden convertirse en una herramienta clave para el gobierno.
Todos los bienes provenían de aseguramientos: los detalles
Lo cierto es que se subasta realizada entre el 25 de julio y el 6 de agosto marcó un nuevo referente para el INDEP, de las 15 mil 218 personas registradas en el padrón único, 867 participaron en las pujas, adquiriendo desde vehículos de lujo hasta maquinaria especializada. En total, se subastaron 145 mil 429 bienes, de los cuales 107 mil 409 fueron adjudicados, lo que representa el 73% de los lotes disponibles.
Entre los artículos más llamativos estuvieron un automóvil Camaro 2016 (Sheinbaum defiende a Morena), vendido por 169 mil pesos; un Austin Morris 1982 de colección, que alcanzó los 2 millones 179 mil pesos; así como una casa en Chihuahua por 3.8 millones y un terreno en Mulegé por 1.8 millones.
Todos los bienes provenían de aseguramientos a la delincuencia organizada o procesos judiciales, la directora del INDEP, Mónica Fernández Balboa, destacó que la recaudación total ascendió a 40 millones 951 mil 471 pesos, cifra muy superior a los promedios históricos de entre 5 y 7 millones. También insistió que el proceso se realizó con transparencia, bajo la supervisión de notarios y del Órgano Interno de Control.
La agenda del INDEP se mantiene activa
El éxito de esta primera subasta ha impulsado la agenda del INDEP para continuar con este tipo de actividades en distintos formatos. Fernández Balboa anunció que en agosto se publicarán las próximas convocatorias para tres modalidades: en línea, a martillo y a sobre cerrado, esta última destinada a inmuebles de alto valor.
Cabe mencionar que además, se mantiene activa la venta directa a través del portal oficial subastas indep.gob.mx, donde se ofertan más de 54 mil piezas y 42 toneladas de bienes, con precios que oscilan entre un peso y cinco mil pesos.
Lo cierto es que, estos artículos incluyen desde joyas y herramientas hasta vehículos y mobiliario, disponibles para compra inmediata con un proceso sencillo y seguro. Sin embargo, la funcionaria advirtió que todas las transacciones deben realizarse exclusivamente en la página oficial para evitar fraudes, ya que se detectaron sitios falsos que solicitan depósitos no autorizados.
El anuncio clave sobre el destino de los recursos
Fue hasta la conferencia matutina del viernes cuando la presidenta Claudia Sheinbaum reveló la finalidad de los más de 40 millones de pesos obtenidos en la subasta. “Decidimos que estos 40 millones (…) iban a ser para salud”, afirmó. El objetivo, explicó, es financiar planes de justicia que contemplen atención médica de calidad y fortalecimiento de hospitales en comunidades vulnerables.
Entre los primeros beneficiados se encuentran los jornaleros agrícolas de San Quintín, Baja California, y el pueblo amuzgo en el sureste del país. «Ahora vamos a hacer un plan de justicia en San Quintín para todos los jornaleros agrícolas. Y el plan de justicia el objetivo que tiene es trabajar con las comunidades, con la gente para ver qué necesitan y cómo apoya el gobierno para que en una decisión colectiva se decidan los recursos que se necesitan para promover bienestar», explicó la funcionaria federal.
En su administración se ampliará el alcance a comunidades afroamericanas y otras que tuvieron injusticias, la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar, ya trabaja junto al Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) para poner en marcha el plan de justicia de San Quintín. Con ello, se busca garantizar que los recursos obtenidos (la mandataria dio su conferencia) a través de las subastas se traduzcan en beneficios para quienes más lo necesitan, la primera subasta del INDEP bajo la administración de Sheinbaum no solo rompió récords de recaudación, sino que definió un precedente en la asignación de recursos con un enfoque social.