No queda mucho. Cada vez es más que probable que México se convierta en uno de los protagonistas claves en lo que respecta a una palabra, que, últimamente, está más que citada por grandes personajes de todo el mundo: tierras raras. Todo gracias a un curioso mineral.
México, protagonista en una de las palabras más conocidas hoy: tierras raras
En México tenemos un metal ansiado y deseado por el resto del mundo. Se trata de un metal que es diferente por el hecho de ser clave a la hora de fabricar cierta tecnología moderna. Gracias a las propiedades magnéticas que tiene, este material es indispensable para fabricar generadores eólicos, coches y teléfonos, entre otros dispositivos.
La Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados, junto con el Parque Científico y Tecnológico del estado de Morelos, se encuentran desarrollando un proyecto muy importante que busca identificar los principales yacimientos de tierras raras en el país. Hay investigaciones recientes que han dicho que México tiene muchas de ellas y mucho de este metal tan buscado: el neodimio.
¿Por qué este mineral es tan importante para el mundo?
Este metal es uno de los elementos con mayor demanda de todo el planeta. ¿Cuál es el motivo? El motivo es que tiene la capacidad de producir imanes tan potentes como ligeros.
Este tipo de imanes son fundamentales para varias industrias como la de la energía renovable (debido a que un generador requiere toneladas del material magnético que se basa en neodimio). Pero no solo eso, también para los móviles, los coches eléctricos o los híbridos.
Además, el neodimio es clave en la fabricación de catalizadores, equipos de pulido de cristales y láseres de alta precisión.
México y su potencial en tierras raras: ¿Hasta dónde llegará?
Según el Instituto de Ciencias Físicas de la UNAM, México, hoy por hoy, tiene una ubicación totalmente privilegiada. Una ubicación que puede permitirle el hecho de desarrollar una industria minera de tierras raras. ¿En dónde? En zonas como Oaxaca, Hidalgo, Coahuila, Durango, Sinaloa y Sonora, donde se han mostrado concentraciones prometedoras de estos metales.
El investigador Lorenzo Martínez dice que, para aprovechar este potencial, México debe hacer antes algunos ajustes como estos:
- Cuantificar los recursos disponibles con estudios algo más detallados.
- Desarrollar tecnología avanzada para la extracción y procesamiento de los metales.
- Fortalecer la investigación científica para conseguir reducir la dependencia de otros países.
El dominio de China y la oportunidad para México
No es de extrañar. Hoy por hoy, China tiene el 97% de la producción mundial de tierras raras, lo que, como es obvio, ha levantado dudas, miedos e inquietudes al respecto. En respuesta, países como Estados Unidos, Reino Unido y también, Dinamarca han comenzado a explorar algunas fuentes de metales para reducir la ya clara dependencia que tienen con el país asiático.
Hoy, México tiene una oportunidad. La de posicionarse en este mercado si consigue desarrollar la infraestructura necesaria para esa extracción y también, para el refinamiento de este curioso metal y otros elementos como son el praseodimio, europio y gadolinio.
Además de la minería común o tradicional, la chatarra electrónica es también una fuente importante de tierras raras. México genera alrededor de 300 mil toneladas anuales de residuos electrónicos que tienen entre su esencia estos metales. Si se hacen procesos correctos de reciclaje y metalurgia extractiva, podría ser una estrategia para recuperar ese material, reciclarlo y no tener que buscarlo en otras partes.
El neodimio y otras tierras raras son esenciales para el futuro de la tecnología y la sustentabilidad energética. Y en esto, México tiene el potencial de ser un actor protagonista en el sector, pero para lograrlo, es importante invertir en investigación, desarrollo tecnológico y estrategias de reciclaje. Si el país logra aprovechar sus recursos, podría reducir su dependencia de China y convertirse en autodidacta en su propia tierra “rara”.