Mientras las potencias mundiales están buscando aumentar la producción de energía a partir de fuentes naturales, México podría optar por usar otro tipo de energía que causaría más contaminación. Después de revelarse que México tuvo un retraso en la producción de electricidad con energías renovables, el país podría comenzar a buscar una alternativa para producir energía, aunque esto signifique contaminar más.
Más energía, ¿más contaminación?
La actual administración, encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum, tiene varios proyectos enfocados a las energías renovables. Sin embargo, el consumo de energía eléctrica de los mexicanos podría orillar al Gobierno a aumentar su producción de energía nuclear.
De hecho, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, los líderes mundiales que participaron en la conferencia firmaron un acuerdo para triplicar su producción de energía nuclear para el año 2050.
Por ello, México podría sumarse a los países que están aumentando su capacidad de producción eléctrica usando energía nuclear. Sin embargo, esto representaría otro retroceso en el Acuerdo de París que, actualmente, está por debajo de los índices establecidos.
Energía nuclear como estrategia
Francisco Barnés de Castro, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) propone cambiar al gas natural por la energía nuclear al grado de convertirlo en una estrategia nacional.
El ex rector mencionó que es importante que México modifique el uso de la energía, priorizando a los coches eléctricos para reducir la contaminación y generar un nuevo sector energético. Incluso, mencionó que la energía nuclear sería de vital importancia, lo que ocasionaría que se incremente la producción de esta energía en el futuro.
Antecedente negativo para México
Aunque parecería una buena idea, México no tiene buenos antecedentes con la energía nuclear. Todo se debe a la Central de Laguna Verde. Durante el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se amplió la planta de energía nucleoeléctrica de Veracruz para aumentar su capacidad de producción.
Además, debido a la sequía, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) aumentó su producción de electricidad a partir de los combustibles fósiles un 20.7%, provocando que las energías renovables disminuyeran hasta en un 38.5% de su capacidad.
Por lo anterior, la energía nuclear sería una opción más factible para las autoridades. De hecho, mientras las energías renovables tuvieron un retroceso durante 2024, la nuclear aumentó en un 50.2%, según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
A pesar de los buenos números que tiene la energía nuclear, la planta que opera en México tiene una mala reputación a nivel internacional. En más de una ocasión, la Asociación Mundial de Operadores Nucleares (WANO, por sus siglas en inglés) alertó de los daños que hay en la central. Incluso, dio calificaciones negativas a la planta por la falta de mecanismos de seguridad operativa.
De hecho, el físico matemático Bernardo Salas sostiene que desde hace más de 20 años alertó sobre la amenaza que representa la planta nuclear ante la falta de elementos de seguridad que protejan a la sociedad de una fusión nuclear y de la contaminación que genera en la zona. Sin embargo, el especialista lamenta que, hasta la fecha, no han escuchado ninguna de sus advertencias.
¿La energía nuclear puede ser limpia?
A pesar de que se cree que la energía eléctrica que produce una planta nuclear puede ser limpia, la realidad es que se produce mucha contaminación por la emisión de los gases de efecto invernadero. Además, los residuos radioactivos siguen representando un problema, no solo para México, sino para todos los países que tienen una planta de energía nuclear.
Esto se debe a que aún no hay solución efectiva que permita deshacerse de estos materiales después de usarlos. Por ello, los países prefieren enterrar los desechos en lugares que, supuestamente, no sufrirán modificaciones por los residuos tóxicos, aunque no sé sepa si lo ocasionará a largo plazo.