Una gran crisis por el agua se aproxima y hay alarmas de que llegue el temido día cero, ¿Estamos a un paso de alcanzarlo? México pasa por uno de los mayores conflictos en su historia con el agua, y el cambio climático no está ayudando a mejorar la situación.
¿Estamos a punto de llegar al día cero? La escasez de agua en México se agrava
Hay un tema que preocupa a todos, el día cero. En México, desde hace unos años, la situación con el agua se ha convertido en una pesadilla. Las sequías aumentan y los niveles de agua en las presas bajan sin piedad. Podría transformarse en un problema sin retorno.
El agua disponible está a punto de no poder cubrir la demanda de necesidades básicas, al menos es lo que advierte la UNAM. Los expertos aseguran que las regiones del norte del país, están en condiciones desérticas y se mantienen con agua subterránea que puede acabarse pronto.
Un día cero no significa que no exista nada de agua, sino que los niveles disponibles serán mínimos y en consecuencia habrá más racionamientos y por más tiempo. Es una emergencia en las zonas afectadas, pues se necesita tomar medidas para suplir las necesidades básicas de la población.
Estas son algunas de las razones por las que estamos unas crisis hídrica sin precedentes
Son varias las razones de esta crisis, de hecho ha sido un tema recurrente que se viene desarrollando poco a poco, pero constante. Hay un tema preocupante y es que, existe corrupción en el suministro, no se reparte de forma equitativa y muchos se aprovechan para robarla de esta manera.
Las pérdidas por fugas, más el agua no contabilizada que se desperdicia en tomas clandestinas, hacen que este problema crezca. A ello se une los altos niveles de contaminación del agua, que impiden un suministro más eficiente. Solo el 50 % del agua recolectada recibe tratamiento adecuado.
Y sin mencionar las sequías de algunas zonas del país. México se divide en tres grandes regiones hídricas, cada una con sus propios retos. En el sureste por ejemplo, hay poca población y mayores fuentes superficiales, el centro concentra las industrias, y el norte es la zona más vulnerable por su calor extremo.
Muchas presas están en niveles rojos, y el cambio climático con las faltas de lluvia no ayudan a mejorar. Para comprender la crisis, vale la pena ver algunas cifras. Solo el 58 % de la población tiene acceso diario al agua y saneamiento básico. Apenas el 14 % de los mexicanos recibe agua las 24 horas del día.
¿Hay tiempo de solucionar este conflicto? Algunas estrategias podrían hacer el cambio
Lo más importante, ¿Podemos salvarnos de un día cero? El cambio ya no puede ser una solución temporal, como se ha planeado desde hace unos años, en espera de las lluvias que cada vez son menos frecuentes y en menos cantidad. Hay que tomar acciones definitivas pronto.
También preocupa que a pesar de las sequías, México entrega 90 millones de metros cúbicos de agua a Estados Unidos para cumplir con un acuerdo. Hace dudar sobre si pesa más las relaciones comerciales o las necesidades básicas de la población.
Se necesita un cambio estructural y sostenido, que incluya mantener, rehabilitar y ampliar la infraestructura hidráulica, revertir la sobreexplotación de acuíferos, promover mejores sistemas de riego, tarifas justas que hagan sostenibles los servicios e invertir en capacitaciones.
Estamos al borde quedarnos sin agua en México y caer en el día cero. El agua ya no puede ser vista como un recurso inagotable. El día cero no es una amenaza lejana, sino una realidad que México podría enfrentar en el corto plazo si no se toman acciones inmediatas y coordinadas en el menor tiempo posible.