En esta temporada de invierno, con la caída de nieve en todas partes, en Japón encontraron una creativa solución para hacer con ella. Cuando pensabas que ese algodón blanco que cae del cielo, solo servía para darnos frío, muñecos y bolas de nieve, te equivocas. Lo blanco que cubre nuestro suelo, puede servirnos para generar un recurso escaso y muy demandado.
La nieve puede servir para mucho más, según Japón
Cada vez que comienza el invierno, cae la blanca nieve y nos cubre con ese sentimiento navideño. Sin embargo, también se convierte en un problema: el frío, calles congeladas, la nieve en tu entrada, y aunque pensabas que no podías sacar nada beneficioso de ella, Japón nos cambia la idea.
Estamos muy enfocados en las energías renovables, y la electricidad es un recurso que, por estos días, puede ser escaso. Con tanta demanda de energía por la inteligencia artificial y centros de datos, necesitamos más que nunca potencial energético.
Así que, Japón da un paso al frente con una idea que suena descabellada: obtener electricidad por medio de la nieve. Sí, ese elemento que cae cada invierno en algunos países, y lo único que hacemos es dejarla derretir, puede servir para obtener energía.
La ciudad Aomori en Japón, que tiene las mayores nevadas del planeta, con hasta 8 metros de nieve cada año. Ese montón de nieve supone un gran gasto para remover y limpiar las calles, pero si, en vez de eso, se usa para producir energía, resolvemos el problema.
Aunque no lo creas, se puede obtener luz con la nieve
Imagina las posibilidades de este sistema en zonas donde la nieve es el protagonista cada invierno y la mayor parte del año. Es una forma de usar lo que la misma naturaleza nos da para mejorar nuestro sistema eléctrico, que necesita un empujón de potencia.
Parece una idea muy extraña; después de todo, la nieve es agua congelada, ¿cómo se puede generar electricidad? Bueno, es posible, mediante un proceso algo largo pero simple. Gracias a cambios de temperatura se puede producir esa energía.
Todo sucede por las corrientes de aire, tanto frío como caliente. Es decir, el aire frío de la nieve se combina con aire caliente de tubos de calor. Este choque de temperaturas hace que una turbina funcione y genere la electricidad.
Un proceso increíble que podría dejar de lado la generación de electricidad por carbón (como este proyecto de la CFE). Mientras existan temperaturas frías, mayor será la oportunidad para generar electricidad. Y Aomori es ideal para ello, pues en invierno tiene cantidades inmensas de nieve.
La reutilización de recursos será clave en el futuro de energías
Es una gran forma de aprovechar un recurso que ya existe. En invierno, muchas regiones de Europa y Norteamérica se enfrentan a grandes cantidades de nieve. Al reutilizar este elemento para un beneficio, se aprovecha lo que la misma naturaleza nos provee.
Tiene un gran atractivo esta idea. Pero no está exenta de desafíos, pues se necesitan grandes instalaciones para almacenar la nieve y poder generar la electricidad. A su vez, mantener el aire caliente puede ser complicado de usar en regiones con climas muy fríos.
Una buena manera de que no se cometan más errores, como lo que Estados Unidos quiere impulsar, pues al tener fuentes renovables, limpias y seguras para generar electricidad complementaria, tal vez las ideas de fuentes no renovables queden en el pasado.
Por lo tanto, mientras algunos países no saben qué hacer con la nieve, Japón encontró una solución viable y que servirá como complemento de energía. Mientras tengamos este tipo de fuentes renovables, tendremos una oportunidad en la carrera por la transición. En el futuro, la reutilización de recursos puede ser la clave para potenciar la energía.