El problema del manejo de la basura por parte de los ayuntamientos es una de los aspectos más relevantes de la gestión de los municipios. En principio, pareciera que para la ciudadania solo es importante resolver la recolección y el traslado de los desechos hasta cualquier lugar, siempre que este no se encuentre cerca del entorno urbano de forma que las consecuencias de tener un basurero en la cercanía no tengan que evidenciarse.
En ese sentido, para los alcaldes, responsables de los ayuntamientos se transforman en gestores de logistica de movilización de desechos del sitio visible y poblado hasta el supuesto relleno sanitario o sitio de disposición final, sin considerar las verdaderas formas adecuadas para el manejo de la basura que se produce desde los sectores, domésticos, comerciales, institucionales, industriales o agrícolas que hacen vida en un espaciio territorial.
Manejo de la basura en Jaltocán afecta la gestión del alcalde
El municipio Jaltocán cuenta con cerca de 11 000 habitantes y la producción diaria de basura es de aproximadamente 44 toneladas diarias, un 2,5 por ciento del total generado por el estado de Hidalgo donde se encuentra este municipio. La gestión y manejo de estos desechos se hace directamente por el ayuntamiento y su disposición se realiza comunmente en el vertedero a cielo abierto que se ha dispuesto a las afueras.
No obstante, en días pasados la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo clausuró el terreno en el que se disponía todo el tonelaje diario de basura producido en el municipio, en virtud que el predio no cumplía con las condiciones mínimas exigidas para la disposición final de los desechos sólidos y por lo tanto causaba daños ya denunciados por los vecinos más cercanos al relleno sanitario.
De este modo, el alcalde Guillermo Amador decidió comenzar trabajos de acondicionamiento de un nuevo predio a pocos metros del recién clausurado, enviando maquinarias tipo retroexcavadoras para su ejecución. Sin embargo, los habitantes de la comunidad de Cuapaxtitla, se apersonaron para impedir que se llevaran a cabo cualquiera de las labores.
Alcalde convocó una reunión con los miembros de la comunidad
Una vez que los trabajos fueron paralizados, Amador procuró una reunión con los vecinos a fin de llegar a un acuerdo, sin embargo, los miembros de la comunidad ya cansados de las externalidades que ocasiona un vertedero, se tornaron intransigentes ante las propuestas del alcalde lo que ocasionó que las discusiones subieran de nivel y se insultaran entre sí.
Durante las discusiones, el alcalde afirmó que sin importar la opinión o afectación de los vecinos la basura sería botada en ese lugar, mientras que las personas afirmaban que no tolerarían un gramo más de desechos y por tanto el alcade deberia buscar otra solución. Bajo esa postura, aunque no llegaron a un acuerdo real, el alcalde y los ciudadanos continuan en torno a un mismo problema dónde se va a disponer los desechos sólidos.
Establecer una solución viable para botar la basura
Una vez disminuidos los ánimos de ambas partes, se concertó que la mejor via es la de buscar generar una mancomunidad con otros municipios para la construcción de un relleno sanitario que permita la adecuada disponsición final de la basura, pues con un vertedero a cielo abierto como el que se tiene actualmente proliferan las enfermedades pulmonares, dermatológicas, las plagas y otros males que aquejan a la población.
Así, aunque el alcalde Amador no ha generado algún tipo de disculpas o ha llevado la basura a otro lugar para su disposición final, se tiene conocimiento que para los próximos días estaria generando alguna solución, entre tanto, continuará llevando los residuos al vertedero para poder realizar la recolección y que la situación de la basura no desborde también en las zonas domiciliarias y comerciales de Jaltocán.