Esta mañana, el general Ricardo Trevilla Trejo, titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, confirmó que arrancará un nuevo esquema de operaciones coordinadas entre lo que serían los Ejércitos Mexicanos y de Guatemala, que tendrán como objetivo inmediato poder reforzar la seguridad en los puntos más vulnerables de la frontera compartida.
Operativos coordinados entre las autoridades en la franja fronteriza
De todas formas, la decisión surge después de que personal guatemalteco fuera agredido en territorio limítrofe; los responsables señalados serían integrantes del Cártel de Sinaloa, junto con células asociadas al llamado Cártel de Chiapas y Guatemala.
Según indicó Trevilla, ambos ejércitos sostienen desde hace meses reuniones periódicas entre mandos regionales; se trata de encuentros operativos, casi silenciosos, donde se intercambia información inmediata y se revisan movimientos prioritarios sobre el terreno, pero el episodio reciente aceleró las decisiones.
Asimismo, el agresor habría disparado contra un oficial guatemalteco en el área conocida como Aguasarca, en Huehuetenango, en cuanto a la lucha contra el narcotráfico detuvieron a “El Pato”, operador de alto rango y líder de “La Mayiza”. En ese sentido, el militar resultó lesionado en el pie y la información fue compartida de inmediato con México.
«Hubo un intercambio de información y se desplegó a personal militar», señaló Trevilla, dejando en claro que ese flujo de datos derivó en el despliegue simultáneo: patrullajes en el lado mexicano y cercos de vigilancia del lado guatemalteco.
Las rutas criminales detectadas por los Ejércitos
En cuanto al desplazamiento, las autoridades identifican una dinámica que trastoca ambos territorios porque se trata de grupos delictivos que cruzan de un lado al otro sin dificultad, usando caminos rurales y comunidades intermedias. Un dato a tener en cuenta es que se dio a conocer que los mismos operan en zonas que conectan Chiapas con municipios guatemaltecos.
Por eso, en la conferencia matutina, el general Trevilla reveló que en esa línea fronteriza se detectan dos estructuras predominantes; entonces, parte del acuerdo consiste en aplicar un plan que genere operaciones coincidentes a lo largo del territorio compartido.
Esto significa que será un patrullaje en espejo, rondines consecutivos y seguimiento de desplazamientos sospechosos para neutralizar rutas antes de que el movimiento criminal migre de un país a otro. Si una unidad avanza del lado mexicano, su contraparte replica la maniobra, evitando vacíos de vigilancia que puedan ser aprovechados.
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