El caso de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa ha sido uno de los más mediáticos en la historia reciente de México, además la falta de transparencia con la que se ha llevado la investigación ha generado gran controversia, por lo que más de una década después de la desaparición de los estudiantes, las familias de los desaparecidos llevaron a cabo protestas que terminaron con incidentes violentos.
Las protestas como un grito de justicia por los desaparecidos de Ayotzinapa
El objetivo de la protesta es que el gobierno entregue toda la información y cualquier documento que esté en su poder del caso de los normalistas de Ayotzinapa. Las familias de los desaparecidos consideran que el gobierno no ha entregado toda la información del caso debido a que esos documentos que resguardan podrían contener información de la participación de funcionarios del gobierno en el crímen.
En ese sentido, este jueves 25 de septiembre, como conmemoración por el undécimo aniversario de la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa, se llevó a cabo una protesta en el campo militar 1-A, en la Ciudad de México, en la que participaron los familiares de los desaparecidos y también alumnos de la Norma Rural “Raúl Isidro Burgos”, en la que se exigió a la Secretaria Nacional, entregar toda la información del caso que posean.
La protesta inició como un acto pacífico alrededor de las 11:00 horas de la mañana, varios autobuses con manifestantes se congregaron en los alrededores del campo militar, y llegaron a estar presentes más de 300 personas en las puertas del campo. En un principio el acto consistió en la concentración de los padres de los desaparecidos dando discursos y mostrando recuerdos de sus hijos desaparecidos, demandando justicia.
Familiares exigen justicia con transparencia
Epifanio Álvarez, el padre del normalista de Ayotzinapa Jorge Álvarez, en su discurso como representante de los familiares de los desaparecidos, recordó a todos aquellos que se quedaron en el camino y no han podido seguir luchando, y que por su memoria y la de sus hijos, las familias no descansarán hasta encontrar la verdad sobre lo que sucedió con los 43 estudiantes y que se haga justicia por ellos.
En sus palabras, Epifanio Álvarez afirmó que el proceso que habían llevado a cabo las autoridades federales y estatales no había contado con la transparencia apropiada. Es por ello, que las familias no cesarán en la lucha porque las instituciones gubernamentales entreguen la información del caso, con el fin de llevar a los perpetradores del crimen contra los estudiantes de Ayotzinapa ante la justicia.
En la protesta, la violencia surgió de forma contundente
Un par de horas después de que iniciara la protesta, la violencia empezó a esparcirse como una plaga entre los manifestantes. Un grupo de encapuchados que se encontraban en el lugar utilizaron un camión de carga como ariete, estrellándose contra la puerta del Campo Militar derribándola en el acto.
Además, los encapuchados que se encontraban en la zona empezaron a lanzar bombas molotov al vehículo de carga que habían utilizado para tumbar el portón militar, generando un incendio que consumió por completo al camión. Todo esto generó que los protestantes se alejaran de la zona y procedieron a alertar a los servicios de emergencia.
Las autoridades no han hecho oficial ninguna detención hasta los momentos, además en las cifras oficiales no se informó de que la protesta haya generado algún herido o víctima fatal, a pesar del nivel de violencia que se vio en la escena de los hechos, lo que responde también a la rápida respuesta de los equipos de emergencia para mitigar el incendio que se generó.