La pausa en la exportación de ganado mexicano hacia Estados Unidos ha sido una de las situaciones que han afectado la economía de México durante los últimos meses, especialmente porque se ha catalogado a los criadores y productores de animales como los responsables de una crisis que no pueden manejar desde la raíz: la aparición de la plaga del gusano barrenador.
De esta manera, el Gobierno de México, encabezado por Claudia Sheinbaum Pardo ha catalogado la medida de restricción del paso fronterizo del ganado tomada por parte de Estados Unidos como injusta, pues, la contaminación con el gusano barrenador no representa un riesgo tan elevado que impida controlar la salubridad de los animales a fin de garantizar que su consumo y el de sus derivados sea seguro en los humanos,
Representantes de agricultura de ambos países sostuvieron una fructífera conversación
Julio Berdegué Sacristán y Brooke Rollins, ambos representantes de los despachos de agricultura de México y Estados Unidos respectivamente se reunieron de forma virtual a través de una videoconferencia con el fin de determinar los esquemas más adecuados para reiniciar las exportaciones de ganado desde México y fundamentalmente para fijar una estrategia efectiva para erradicar el gusano barrenador.
En diferentes oportunidades, el gobierno estadounidense ha realizado exigencias a los productores mexicanos para garantizar la continuidad del comercio de ganado de una forma que se garanticen las características sanitarias de ingreso al mercado de los Estados Unidos. Ante lo cual México se ha pronunciado considerando que dichas exigencias han sido excesivas.
No obstante, esta vez, ambos gobiernos han coincidido en que México ha implementado las medidas necesarias para que el ganado mexicano sea seguro y han concluido sobre la necesaria visita de los expertos estadounidenses para certificar que el gusano barrenador del ganado (GBG) no representa una amenaza para las exportaciones, por lo que estas pueden reanudarse en breve.
Cooperación bilateral para erradicar el gusano barrenador del ganado
Dentro de los acuerdos alcanzados entre los secretarios de agricultura se encuentra la cooperación abierta de Estados Unidos con los ganaderos y el gobierno mexicano para mantener las fronteras abiertas a la exportación. De esa manera, se extendió el convenimiento de que ambos gobiernos implementarán medidas para detener el avance del gusano barrenador en el ganado del sur, centro y norte del país.
En ese sentido, se espera que una misión de expertos delegados por el gobierno de Estados Unidos asista para verificar el repliegue de la plaga en el ganado mexicano. Así mismo, se anunció la contribución que los estadounidenses realizarán para la construcción y puesta en marcha de una nueva planta de producción de moscas estériles específicamente en Chiapas.
Esta cooperación se traduce en una inversión de aproximadamente 21 millones de dólares por parte del gobierno estadounidense con la cual se espera alcanzar la efectividad del combate contra el gusano barrenador del ganado de manera permanente, reforzando las medidas durante la cria, sino también durante la movilización del ganado, procurando su inspección, vigilancia y tratamiento eficazmente.
Frenar la plaga del gusano barrenador es importante también para la salud humana
Durante los últimos días, específicamente desde el mes de abril se han dado casos de infección por gusano barrenador en humanos en la región de Chiapas. Esta afección, aunque no representa un riesgo elevado para los seres humanos puede causar graves consecuencias si no es tratada adecuadamente, es por ello que la preocupación se extiende más allá del sector agrícola.
Hasta ahora, se han reportado 6 casos de gusano barrenador en personas en Chiapas, por lo que se ha emitido una alerta preventiva de forma que la población se encuentre a la expectativa ante la aparición o cercanía de la mosca productora de esta plaga, además se ha mantenido bajo control médico a las personas, de las cuales ya 4 han sido dadas de alta médica sin mayores complicaciones.
