En una maniobra táctica que busca sincronizar la infraestructura petrolera nacional con los requisitos internacionales de sostenibilidad, Pemex (Petróleos Mexicanos) ha concretado este jueves la entrada en funcionamiento de una gran asociación técnica con Japón. Por la vía de una sociedad con la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA), la petrolera estatal ha dado inicio a un proyecto de aplicación para aumentar la eficiencia energética y por ende, disminuir la huella ambiental de sus actividades.
Implementación de innovación tecnológica en la Refinería de Cadereyta
El proyecto, que consiste en un grado de mejora de la gestión industrial de la paraestatal, se halla en este momento en fase crítica de ejecución. Según el comunicado oficial, las actividades están en la etapa de «integración de sistemas, validación de resultados operativos y evaluación de las mejoras en el consumo energético». La meta técnica es clara: se busca generar ahorros de energía a partir del reforzamiento del rendimiento del Sistema de Control Distribuido ya existente.
La modernización no supone un hecho aislado, sino que se trata del resultado de la formalización del acuerdo que se realizó en el año 2023. De este modo la colaboración ha permitido ejecutar actuaciones físicas en la infraestructura de Nuevo León, siendo muy significativa la rehabilitación de la planta Combinada 1 y de sus calentadores a fuego directo. Como parte de este desarrollo de la tecnología también hay que considerar que se han ejecutado trabajos de instalación de analizadores de oxígeno destinados a mejorar la calidad de la combustión. Además de ingeniería de control y optimización de procesos: trabajos desarrollados por los especialistas de Pemex y también de JICA-ADAPTEX.
La sostenibilidad como prioridad en la estrategia de la empresa
En el marco de la visita técnica de la delegación japonesa al Centro Administrativo Pemex (CAP), el director general de la empresa petrolera, el Dr. Víctor Rodríguez Padilla, hizo hincapié en la importancia geopolítica y medioambiental que este acuerdo reitera. Para la dirección de esta empresa del Estado, la cooperación entre ambos países y la transferencia de las mejores prácticas en temáticas de eficiencia energética son determinantes para acelerar los objetivos de sostenibilidad nacional.
Rodríguez Padilla fue contundente al afirmar que la «mitigación de gases de efecto invernadero (GEI)» es la prioridad estratégica de la empresa, elemento que considera fundamental para la consecución de los compromisos climáticos globales asumidos por el país. El director general aseguró que esta visión de la empresa no se limita al discurso sino que «se traduce en acciones concretas, cuantificables y comprometidas por toda nuestra cadena de valor». De esta manera, el proyecto aspira a disminuir la emisión de GEI a la par que moderniza la operatividad de la refinería.
Un modelo para el sector energético
Entre los especialistas de la paraestatal, el trabajo junto a Japón es considerado un modelo a seguir. El Ingeniero Carlos Armando Lechuga Aguiñaga, director de Procesos Industriales de Pemex, puso de manifiesto en la reunión que la colaboración con el país japonés no solo significaría un avance para la Refinería Cadereyta en concreto, sino que, además, «dejaría un modelo en la industria en el sector energético».
Para Lechuga Aguiñaga, la adopción de estas tecnologías significaría estar avanzando en una operación que sea «más eficiente, más segura y más sostenible». El funcionario contextualizó esta tendencia como parte del presente internacional, afirmando que «en un entorno internacional donde la transición energética y la mitigación del cambio climático son prioridades globales, nuestra iniciativa conjunta es un claro ejemplo de cómo la cooperación internacional puede generar un impacto positivo y duradero». Así, las asociaciones internacionales puede ofrecer soluciones pragmáticas a la crisis climática urgente en el sector energético.