Los baches pueden ser un verdadero dolor de cabeza para los mexicanos, pues nadie quiere encontrarse uno en medio de la calle, ni mucho menos cuando estas apurado o estresado, pero ahora tenemos buenas noticias. El gobierno de CDMX tiene un nuevo plan para acabar con ellos para siempre, pero ¿De qué se trata?
El problema de los baches
La Ciudad de México (CDMX) es una de las más grandes del mundo, pero sufre de un problema que afecta está afectando a miles de conductores y son los baches, que complican el tráfico y son un peligro constante para la seguridad.
Durante años, las soluciones para los baches han sido temporales y costosas. Los métodos tradicionales son lentos, requieren cerrar carriles y a menudo la reparación no dura, pues el bache reaparece con las lluvias o el intenso tráfico, causando daños severos a los autos.
La situación ha generado una gran frustración y las personas ya asumieron que este problema nunca tendrá solución, sin embargo, las autoridades de la CDMX han reconocido que es hora de cambiar de estrategia, buscando una solución que sea más rápida, eficiente y, sobre todo, duradera.
La clave no está solo en el material que se usa, sino en la velocidad, la capacidad de producción y el uso de nueva tecnología para reparar el problema de raíz, así que ahora la capital mexicana está implementando un plan ambicioso que busca decir «adiós a los baches» de una vez por todas.
Una nueva estrategia
Hace poco vimos, cómo el gobierno les facilita la vida a los ciclistas y ahora, quiere solucionar un problema que afecta a miles de conductores y para lograrlo, tienen un presupuesto superior a los 150 millones de pesos para atacar este problema.
La meta es repavimentar 25 vías primarias y 35 ejes viales entre octubre de 2025 y mayo de 2026, aplicando un total de 3.5 millones de metros cúbicos de asfalto, pero para poder lograrlo de forma rápida las autoridades planean construir una nueva planta de asfalto estratégica.
La planta estará en el Bordo de Xochiaca, un espacio ya destinado al manejo de residuos. Según el secretario de Obras, Raúl Basulto, el objetivo es doble: agilizar los traslados del material a distintas zonas de la CDMX y crear nuevos compuestos de asfalto que den una mayor durabilidad a las calles.
De hecho, la propia Presidenta Claudia Sheinbaum ha solicitado paciencia a la ciudadanía, indicando que el plan de reencarpetamiento masivo comenzará una vez que termine la temporada de lluvias, que es cuando se pueden realizar trabajos duraderos.
Atacando el problema de raíz
Pero además de poner mucho dinero y construir la nueva planta, la CDMX quiere atacar el problema de raíz asegurándose de que los baches no vuelvan a aparecer. El Secretario de Infraestructura, Jesús Esteva, mostró una máquina muy interesante que puede lograrlo.
Básicamente, la máquina va quitando el asfalto que está roto, rascando hasta llegar a la base de la calle, que debe estar muy firme. Luego, la máquina recupera ese asfalto viejo (sin tirar nada) y lo mezcla con cemento.
Automáticamente, con esa mezcla, va poniendo una base nueva en el agujero y ya solo falta aplanar bien y poner la capa final de asfalto. Con este proceso la solución no es solo un ‘parche’ sino que se aseguran que el problema se termine.
Tu también puedes ser parte de esto
Si eres uno de los automovilistas que ha sido afectado por un bache, las autoridades han facilitado varios medios para que puedas reportarlo o incluso presentar una reclamación por los daños que haya sufrido tu vehículo.
Puedes hacerlo por WhatsApp usando el chatbot de LOCATEL, a través de la aplicación oficial de CDMX, o bien, llamando por teléfono al *0311 o entrando a la página oficial de LOCATEL. La idea es que con la colaboración de todos, se puede solucionar este problema lo más pronto posible.
Sin duda, el gobierno hará una gran diferencia con esta iniciativa, pues una ciudad sin baches significa menos daños a los automóviles, menos accidentes y un entorno más seguro para todos. Y lo mejor es que por fin atacarán este problema de raíz, asegurándose que por fin podamos decir adiós a los baches, tal como la CFE dice adiós a los vampiros.