La innovación siempre llega con cambios, y es el turno para los motores de coches, que ya hemos visto de todas sus clases, pero hay un elemento que quizás no sabías y supone una modificación a las costumbres. Puede que lo extrañes o no, pero este aspecto nos muestra que todo cambia y el tiempo pasa.
¿Sabías que los nuevos motores vienen con un cambio inesperado?
Si conduces desde hace tiempo, tal vez te sientas un poco anciano o fuera de ritmo cuando veas el cambio en los coches modernos. Para muchos conductores de costumbre, un chequeo rápido del coche incluye medirle el aceite al motor con la confiable varilla.
Ahora, no podrás hacerlo. La clásica varilla de medición de aceite ya no está. En su lugar, los nuevos autos ofrecen una lectura digital en el tablero. Para algunos es un elemento que pasa desapercibido, pero si le preguntas a un amante de los coches, este cambio es una locura.
El simple hecho de medir y comprobar que el aceite esté en su nivel correcto, es una manera de interactuar con tu coche. Pues, en modelos como la nueva Ram 1500 y Jeep, la varilla, tan querida y útil para muchos, no está disponible, y ahora se recurre a lo digital.
Para los amantes de los coches de motor, cambiar y medir el aceite ellos mismos, es parte esencial del mantenimiento, de lo contrario sería como usar un coche eléctrico (esta es la guía para mantener tu auto eléctrico en buenas condiciones).
Pero no es una novedad para todas las marcas, por ejemplo, Mercedes-Benz, BMW y MINI llevan años sin usar la varilla del aceite. Sin embargo, hasta ahora, los fabricantes estadounidenses se habían resistido a eliminar esta pieza tan familiar para los conductores.
¿Cuál es la razón de eliminar la varilla del aceite en los coches nuevos?
Aunque pensemos que se debe a un tema de tecnología y avance, la verdad es que responde a las nuevas costumbres y desconfianza de las marcas. Quizás las generaciones anteriores sentían más conexión con sus coches y estaban pendientes de lo que faltaba, como una costumbre.
Sin embargo, la actualidad es que las personas prefieren lo digital, la comodidad y no ensuciarse las manos sin necesidad. Es más fácil ver en pantalla lo que requiere el auto, que estar pendiente u olvidarte de hacer algún cambio y comprometer el estado de tu motor.
Esto es algo que las marcas lo saben, y por ello desconfían de la revisión manual y prefieren incluirlo para comodidad del usuario. Además, los sensores ofrecen datos más precisos: no dependen del nivel del auto, la temperatura del motor ni del ángulo de revisión.
De hecho, si algo no está bien, se puede notificar al conductor por medio de la app conectada. Es tan simple como que, la tecnología avanza y con ella vienen los cambios inevitables. Aunque hay personas que prefieren la independencia y no confían en sistemas automáticos.
Desde el punto de vista de las marcas, esto también puede protegerlos de errores del usuario que afecten la garantía del coche. Muchos conductores no saben revisar correctamente el aceite, lo hacen con el motor caliente, en terreno inclinado o no interpretan bien los niveles.
¿Perdemos nuestra autonomía o simplemente es parte del futuro que viene con cambios?
Tal vez muchos no están listos para confiar en una pantalla, pero es una realidad que debemos aceptar. La tecnología se mueve a pasos agigantados, hemos visto motores eléctricos, de hidrógeno, e incluso de aire comprimido como este, pero algunos mantienen preferencia por lo clásico.
La varilla de aceite, más que una simple herramienta, simboliza la conexión entre el conductor y su coche. El gesto de sacarla, limpiarla y observar el estado del aceite representaba autonomía, confianza y experiencia. Al desaparecer, también se pierde parte de ese vínculo.
Con el cambio inesperado en los nuevos motores y la desaparición de la varilla del aceite, solo nos queda esperar cómo lo toman los usuarios a futuro. Si la relación entre humano y máquina cambiará o seremos capaces de adaptarnos y confiar en lo digital por completo.