La competencia en la industria automotriz siempre ha sido enorme ¿Quién tiene el coche más rápido? ¿Quién tiene el coche más eficiente? ¿Quién tiene más ventas? Son algunas de las tantas preguntas que encienden la guerra entre las marcas, pero ahora ha llegado una marca que apuesta por algo diferente, pues no se trata del coche más rápido ni eficiente, sino del más estrecho del mundo y lo más curioso es que esconde una sorpresa.
La innovación nunca se detiene
La innovación en la industria automotriz, parece que nunca va detenerse, sin embargo, hay tantos caminos para la innovación que nunca sabemos lo que puede hacer una marca, pues mientras unos apuestan por la velocidad, otros se enfocan en la apariencia.
Pero ahora, una marca ha tomado un camino completamente diferente y ha logrado captar la atención mundial por tener el coche más estrecho del mundo con apenas 19 pulgadas de ancho (48.26 cm), de hecho es tan delgado que podría caber fácilmente en un espacio de estacionamiento para motocicletas.
El coche es obra del mecánico italiano Andrea Marazzi, quien construyó este microcoche a partir de un Fiat Panda, como un homenaje al 45 aniversario del icónico modelo y su trabajo fue presentado en el evento ‘Panda a Pandino’ en Italia, donde se convirtió en la sensación viral de la que todos hablaban.
El coche más estrecho del mundo
El nombre de este curioso coche es Panda for one y su secreto es que no tiene un motor tradicional, sino un sencillo motor eléctrico de baja potencia, una idea tan innovadora como el hiperdeportivo que superó todos los récords.
Su apuesta por ser el coche más estrecho no es un capricho, sino un reflejo del ingenio de Marazzi, pues en lugar de buscar velocidad, optó por la simplicidad, la eficiencia y un enfoque sostenible que pone en duda la necesidad de la combustión interna.
Tiene un aspecto que parece sacado de un dibujo animado, con un color azul celeste, una estética bidimensional y su interior está reducido a lo más esencial, con un único asiento para el conductor y un pequeño espacio trasero que podría usarse para un niño o para guardar cosas.
Su carrocería fue modificada totalmente para que pueda ser más estrecho, sin embargo, su creador conservó los elementos originales del Fiat Panda, como el volante, las ventanillas manuales y los espejos retrovisores, lo que le da un toque nostálgico y familiar que contrasta con su inusual forma.
No todos toman el mismo camino
El coche tiene un peso de apenas 265 kg, sin embargo, no está diseñado para altas velocidades, pues su motor tiene una velocidad máxima que no supera los 15 km/h, sin embargo eso no le importa a su creador, quien de igual modo logró su objetivo.
Marazzi ya ha iniciado el proceso para que el vehículo sea reconocido por el Guinness World Records como el coche más estrecho del mundo, lo que nos recuerda que la pasión y la creatividad pueden lograr proyectos que la industria a gran escala a menudo ignora.
Mientras la mayoría de los fabricantes se buscan crear autos eléctricos de rompan récord de velocidad o autonomía, los proyectos como el de Marazzi demuestran que la verdadera innovación puede estar en las cosas más simples.
El coche más estrecho del mundo ha llegado precisamente para romper ese récord, pero también para demostrarnos que la innovación tiene muchos caminos diferentes y que no se necesita una inversión millonaria para ser creativos, ni tampoco para desarrollar un coche que sea más amigable con nuestro planeta y otra prueba de ello son los coches eléctricos más baratos del país.