Debido a la evolución del mercado automotriz en este estado de México, el incremento de neumáticos de gran tamaño que son compatibles con vehículos eléctricos, SUV y camionetas, está dejando atrás a los modelos convencionales.
Hace tiempo que México es considerado como un punto estratégico para la fabricación de llantas destinadas al mercado latinoamericano. Los fabricantes se vieron obligados a reevaluar sus capacidades operativas por la consecuencia de las nuevas especificaciones técnicas, sumadas a la presión económica global.
Con el fin de que las instalaciones sean más eficientes y especializadas, algunas de ellas, ya no responden a las exigencias actuales del sector. La modernización no es siempre posible, y a veces se opta por concretar operaciones en sitios más avanzados.
En este estado, una planta importante enfrenta su final
En Querétaro, desde el año 2002 esta instalación de Michelin formó parte del crecimiento industrial de una reconocida empresa francesa. Sin embargo, al tener una capacidad limitada y tecnología diseñada para modelos de menor tamaño, este centro productivo fue útil durante un tiempo.
En 2004, fue sede nacional de operaciones, pero con el tiempo las SUV y los automóviles más robustos pasaron a dominar las ventas, desplazando a los vehículos ligeros que requerían neumáticos estándar. Dentro de esta realidad, mantener sitios operativos se volvió difícil desde el lado técnico y financiero.
Tras esto, la planta dejará de operar antes de que termine el 2025, entonces aunque la compañía no abandona el país, si reorganiza sus recursos. También, ante la posibilidad de una nueva demanda, esto afectará a 480 trabajadores en el estado, ya que se quedan sin empleo.
Reconfigurar la operativa quiere decir que habrá medidas compensatorias
En este caso en particular, al menos 480 puestos de trabajo se perderá directo en la región, por ese motivo la compañía incorpora un programa en la región. En ese sentido, la empresa añadirá un programa de reducción de espacio social que da lugar a la reconfiguración operativa de los puestos mencionados con anterioridad.
Michelin fue claro e indicó que implementará un programa que intenta reducir el impacto social, con paquetes de indemnización, asesoría laboral y acceso a cursos de capacitación que forman parte del plan de salida.
Otra parte importante que se suma a lo mencionado es que se estableció un fondo regional para promover proyectos sostenibles que dinamicen la economía local. Lo que se busca es canalizar parte del capital humano y experiencia técnica de los trabajadores hacia nuevas oportunidades de desarrollo económico y social, esto no debe romper el ecosistema de Querétaro.
Otra zona de México que comienza a tener mayor relevancia
Si bien en Querétaro se pierde una planta histórica, se abre el mercado local para otra instalación en Guanajuato que ya existe desde el año 2016 en la ciudad de León, en donde se producen día a día 13 000 neumáticos de gran tamaño para varias aplicaciones y cuenta con tecnología de última generación.
La importancia de esta planta es que su diseño permite solucionar necesidades del mercado como lo serían: autos eléctricos, minería, transporte agrícola y vehículos industriales, superando las capacidades a las de la instalación queretana.
Al absorber parte de la producción reubicada, la sede administrativa de la empresa seguirá en Querétaro, allí se gestionará el servicio corporativo regional para zonas como México y Centroamérica, logrando que el estado siga siendo importante para la operativa de la compañía.
Así es como el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, insistió en que no se trata de que no haya inversiones, sino de una adaptación operativa. En sus dichos, el funcionario comunica de manera formal esta determinación que se entiende como una fusión productiva entre dos plantas priorizando la más preparada.