Los coches están transformando a toda la industria automotriz, creando una revolución silenciosa que poco a poco dejará a algunos atrás. Quienes se manejan en este mundo de los coches, saben que la tecnología va a pasos agigantados, y en este sector no es la excepción. Por ello, algunos que no se muevan al mismo ritmo, inevitablemente quedarán atrás.
La tecnología de coches eléctricos trae consigo un nuevo auge de especialistas
Cada vez que vemos una revolución, trae consigo consecuencias y cambios inevitables. En el caso de los autos, no es la excepción. Es un hecho que ya hemos vivido, pues los coches se han modificado con el tiempo, aunque nunca un cambio tan trascendental como ahora.
Estamos pasando de la combustión de motor interna (con gasolina) a coches eléctricos e híbridos, que utilizan sensores y su mecánica es más enfocada en la electrónica. Se parecen más a un computador que a un coche tradicional, por lo que no todos los mecánicos están familiarizados.
En México y Latinoamérica, puede que todavía no veamos del todo esos efectos. Quedan muchos coches a gasolina por las calles, y para que la revolución se dé por completo, tal vez falte algunos años. Sin embargo, es una realidad que no podemos evitar.
Con el paso del tiempo, los eléctricos y nuevos sistemas de autos, van a llenar las calles. Y solo los mecánicos y centros especializados que se actualicen, certifiquen e instruyan constantemente, serán quienes mantengan sus empleos.
Aquellos que se queden atrás, perderán oportunidades de empleo
En Europa, específicamente en España, es un tema que ya está sucediendo. Los ministerios de educación, han lanzado nuevos programas para certificar personas, pues los talleres mecánicos se están quedando atrás y algunos no cuentan con especialistas para coche eléctricos e híbridos.
Si los mecánicos se quedan atrás en conocimientos, sin actualizarse, quedarán cada vez con menos trabajo. Además, ahora que la conducción autónoma es el enfoque de las marcas (como este primer coche totalmente autónomo que le gana a Tesla y BYD), los mecánicos deben seguirle el ritmo a los avances.
Imagina que te quedas en medio de una carretera por una falla en tu coche eléctrico, pero ningún mecánico de la zona sabe cómo funciona este sistema. Si no cuentan con señal en tu celular para avisar a tu servicio técnico, o estás en un área muy remota para que lleguen, quedas a la deriva.
Por ello, deben formar nuevos profesionales que sepan manejar estos sistemas de los nuevos coches. De hecho, la transición y revolución energética, no es solo para los coches. Implica un cambio en todo en general, desde empleos, hasta formas de trabajo.
Una transformación inevitable, pero también hay escasez en este sector
Otro problema que está afectando a Europa y el mundo es que, hay escasez de mano de obra en los talleres. Tal como sucede con la falta de camioneros en Japón, puede que las certificaciones y nuevas especializaciones, sea un problema para algunos mecánicos y prefieren hacerse a un lado.
Un taller mecánico pequeño y familiar, tendría que desembolsar una cantidad alta de dinero para hacer cursos de actualización y certificaciones, el dilema es que no todos están dispuestos a pagar ese precio. La consecuencia directa es que se queden sin empleo en el futuro.
Los coches eléctricos tienden a un mantenimiento más sencillo que los autos mecánicos. Son menos piezas y casi todo es computarizado, por lo que la mayoría de usuarios los llevan directamente a su concesionario. Esto ya es una pérdida de trabajo para centros mecánicos independientes.
La transición y revolución de la industria automotriz será gradual, hay suficiente tiempo para que los mecánicos se vayan actualizando y formando con estos nuevos sistemas. No solo se cambiarán los coches, y su forma de conducir (con la conducción autónoma), también la manera de trabajar la mecánica, ahora hay que ser especialistas en electrónica, software y seguridad eléctrica, quienes no lo logren quedarán atrás.