Si bien todavía no hay mucha información sobre el accidente de una aeronave en las afueras de Ankara, Turquía, que se cobró la vida de todos sus pasajeros, incluyendo al jefe del Estado Mayor de Libia, la recuperación de la caja negra entre los restos del impacto será determinante para poder saber qué ocurrió exactamente con el avión.
Encuentran la pista clave
Tras un exhaustivo trabajo de los equipos de emergencia, el ministro del Interior de Turquía, Ali Yerlikaya, anunció la recuperación de la caja negra en la zona donde un avión que cubría el trayecto entre Ankara y Trípoli sufrió un fatal accidente. Lamentablemente, todos los pasajeros y tripulantes fallecieron por el impacto, incluyendo al jefe de Estado Mayor de Libia, Mohamed Ali Ahmed al Haddad, que se encontraba entre los pasajeros.
«El registrador de voz y la caja negra de la aeronave fueron recuperados», aseguró el ministro, quien estuvo supervisando personalmente los esfuerzos de los equipos de respuesta a emergencia en el lugar del accidente, apenas a unos 50 kilómetros de Ankara, capital de Turquía y lugar donde inicia la ruta que debía seguir. «Las autoridades competentes iniciaron su examen», agregó.
El funcionario turco reconoció avances en la identificación y recuperación de los restos; no obstante, los cuerpos de las ocho personas a bordo, según el manifiesto del vuelo, siguen en el lugar del siniestro. Fragmentos del avión fueron detectados en una superficie de más de 3 kilómetros cuadrados, según informó el funcionario turco.
«Un total de 408 personas, entre equipos de rescate, gendarmería, policía y servicios de salud, así como 103 vehículos terrestres y 7 aeronaves, están movilizados. Drones, incluidos drones térmicos, también transmiten imágenes en tiempo real de la zona», precisó Yerlikaya.
Lo que se sabe hasta ahora
Según informaron las autoridades turcas, la aeronave que transportaba al jefe de Estado Mayor libio, que se encontraba en Turquía en una misión oficial para reforzar la cooperación militar y de seguridad entre Ankara y Trípoli, despegó de la capital turca a las 20:10 hora local, pero casi de inmediato solicitó hacer un aterrizaje de emergencia en las cercanías de la localidad de Haymana, 60 kilómetros al suroeste de Ankara.
El ministro admitió que no se pudo volver a establecer contacto con los pilotos, cuya última comunicación fue registrada a las 20:52 de la hora turca. En el avión, además de la tripulación y la principal autoridad del Ejército de Libia, Mohamed Ali Ahmed al Haddad, viajaban otras cuatro personas. Todas ellas, figuras que ocupaban cargos importantes en la cúpula militar libanesa.
Entre las víctimas están el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Terrestres, Al Fituri Ghraibil; el director de la Autoridad de Fabricación Militar, Mahmud al Qatawi; el asesor del jefe del Ejército, Mohamed al Asawi Diab; y el fotógrafo de la oficina de prensa, Mohamed Omar Ahmed Mahyub.
Al cierre de esta edición, la información oficial asegura que el incidente ocurrió menos de 40 minutos después de que el avión despegara y que, a los 15 minutos de abandonar el aeropuerto, los pilotos informaron de un «problema eléctrico«, pero los expertos creen que esta explicación es insuficiente.
Libia de luto
La noticia fue confirmada por el ministro del Gobierno de Unidad Nacional (GUN) de Libia, Abdul Hamid Dbeibé, a través de una publicación en su perfil de Facebook en la que dijo: «Esta inmensa pérdida es una gran pérdida para la nación, la institución militar y todos los libios. Hemos perdido a hombres que han servido a su país con sinceridad y dedicación, y que han sido ejemplares en su disciplina, responsabilidad y compromiso social», y extendió su «más sentido pésame a las familias de los difuntos y sus compañeros de las Fuerzas Armadas».