El embajador de Chipre ante la Santa Sede, George Poulides, quien es el decano del Cuerpo Diplomático acreditado en el Vaticano, en el saludo emitido durante la audiencia que sostuvo el Papa León XIV con todo el Cuerpo Diplomático en la mañana de este viernes, advirtió que todos y cada uno de los países presentes están dispuestos a responder al llamado a la paz que realiza con tanto fervor el Sumo Pontifice.
Ante los desafíos que presenta el mundo actual en cuanto a la propia humanidad los embajadores que conforman este cuerpo diplomático asumen el inmenso compromiso de trabajar junto con la Iglesia católica para hacer frente a los conflictos, no sólo aquellos que se manifiestan como guerras armadas, también los que implican la dignidad humana.
El cuerpo diplomático acude al llamado de ser «constructores de la paz»
Poulides, en nombre de todos los representantes del cuerpo diplomático se manifestó dispuesto a trabajar de la mano del máximo representante del Vaticano y la Iglesia católica para hacer frente a los retos que se presentan en la actualidad, asumir con profundo entusiasmo temas como la migración, la probreza y otras situaciones que ponen en riesgo la propia dignidad de las personas y la condición de la humanidad.
De ese modo, el cuerpo diplomático responde al clamor que el Papa León XIV y su antecesor Francisco elevaron para la finalización definitiva de las guerras en el mundo, pues desde cada lugar del mundo es fundamental reconstruir las relaciones humanas basadas en el respeto y la valoración de las diferencias, además de consolidarse de esta manera una nueva forma de la diplomacia.
Al respecto, Poulides, como decano del cuerpo diplomático también asumió que este llamado del Papa cuestiona los sistemas de relacionamiento internacional de la actualidad, rescatando que en la actualidad se configuran polos de poder no sólo por su fuerza armamentística sino por su capacidad de influir en la política, la economía, la alimentación e incluso el comercio o el cuidado del planeta.
La Iglesia y el cuerpo diplomático en favor de la humanidad
Otro de los aspectos resaltantes del saludo de Poulides fue el agradecimiento de todos los embajadores acreditados al cónclave, por cuanto consideran que se ha cumplido la voz del Espíritu Santo al elegir con su sabiduría al Papa León XIV, pues su experiencia de vida eclesiástica en diferentes latitudes, le ha dado el conocimiento de diversas culturas y la comprensión profunda de la humanidad.
Destaca la sensibilidad del Sumo Pontífice ante lo que llama «los desafíos de nuestro tiempo»:
«La mirada de León XIV se dirige al mundo, a sus periferias silenciosas, a las diferentes culturas en las que se reconoce el compromiso de una Iglesia que quiere hacerse cada vez más cercana a la humanidad»
Todo esto, además enmarcado en este importante año para los católicos, pues es el jubileo de la esperanza, durante el cual deben perdurar efectivamente los dones del Espíritu, la fé, la esperanza y el amor, este último como principio de la fraternidad y la solidaridad, con las cuales, se da inicio a las relaciones humanas en un nuevo marco de respeto y de comprensión de las diferencias entre todas las culturas del planeta.
La Iglesia es el «refugio» de la humanidad
El decano de los diplomáticos acreditados en la Santa Sede destacó también que el pontificado de León XIV está marcado por los diferentes retos de la humanidad, que actualmente se encuentra desorientada, en medio de la velocidad de la información, la creación y avance de la Inteligencia Artificial, entre otros aspectos, por lo que se unen al Sumo Sacerdote para cumplir con la misión de brindar un refugio desde la Iglesia católica.