Israel continúa la ofensiva militar en la Franja de Gaza, la respuesta armada del gobierno de Benjamín Netanyahu, tras el ataque perpetrado por Hamás el 7 de octubre de 2023, derivó en una campaña prolongada, con consecuencias humanitarias cada vez peores sosteniendo que buscan eliminar la infraestructura del grupo islamista.
Tras más de dos meses sin suministros básicos por el bloqueo casi total a la entrada de ayuda humanitaria que se impuso desde marzo, la ONU advirtió sobre el riesgo inminente de hambruna e insiste en que las condiciones para la población civil son insostenibles y reclaman la apertura urgente de corredores seguros.
Por este motivo, tres gobiernos que se encuentran cercanos a Israel le hicieron saber su desacuerdo: Francia, Reino Unido y Canadá. En conjunto, los mandatarios dieron a conocer un mensaje directo a Netanyahu indicando que si no cesa la ofensiva militar en Gaza ni facilita el ingreso de ayuda, podrían adoptarse medidas concretas en represalia.
La amenaza de sanciones diplomáticas para Israel
Pese a no indicar cuáles serían esas acciones, los presidentes Emmanuel Macron y Mark Carney junto al primer ministro Keir Starmes señalaron que “no se quedarán de brazos cruzados” ya que calificaron la situación como “intolerable” por el sufrimiento civil.
También los mandatarios señalaron que la asistencia que Israel permite entrar a Gaza es “claramente insuficiente”, exigiéndole al gobierno de Israel que levante las restricciones que impiden el trabajo independiente de las agencias humanitarias.
Asimismo, indicaron que el lenguaje que utilizan funcionarios israelíes que surgieron el desplazamiento forzoso de civiles palestinos, lo cual violaría el derecho internacional humanitario. Son 22 los países donantes que presionan a Israel para restablecer el acceso humanitario, entre ellos se encuentran Alemania, Japón, Australia y Nueva Zelanda, ellos mismos sostuvieron que vincular la ayuda a objetivos militares no es aceptable.
La cumbre pactada en Nueva York coorganizada entre Francia y Arabia Saudita
Los tres líderes occidentales mencionaron la conferencia prevista para el 18 de junio en Nuevo York, coorganizada por Francia y Arabia Saudita, en la que se busca generar un consenso sobre el futuro de Gaza y poder avanzar hacia una solución política a largo plazo.
Hasta el momento, la idea propuesta sigue siendo la creación de dos Estados como único camino viable para una paz duradera. En ese sentido, Macron, Carney y Starmer reafirmaron su disposición para reconocer un Estado palestino, como parte de un proceso que garantice seguridad tanto para israelíes como para palestinos.
“Estamos listos para trabajar con quienes compartan este objetivo”, afirmaron en su declaración. Además, reiteraron su apoyo a las negociaciones mediadas por Estados Unidos, Qatar y Egipto, centradas en lograr un alto el fuego inmediato y en facilitar la liberación de los rehenes aún en manos de Hamás.
Cifras que asustan en Gaza: la ayuda no alcanza
De todas formas, el gobierno de Israel permitió esta semana el ingreso de nueve camiones con suministros humanitarios, incluyendo alimentos para bebés. Tom Fletcher, jefe de Asuntos Humanitarios de la ONU, indicó que este gesto se trata de “una gota en el océano” luego de once semanas de bloqueo.
A día de hoy, los informes del Ministerio de Salud en Gaza, reconocidos por la ONU, señalan que en más de 53 000 las muertes provocadas por los bombardeos israelíes. A su vez, el ataque inicial de Hamás dejó 1.218 muertos y 251 rehenes, de los cuales 57 siguen cautivos.
De todas formas, Israel tiene una presión diplomática que sigue creciendo por los cuestionamientos humanitarios, ya que sus aliados occidentales sostienen que seguir con la ofensiva sin garantizar condiciones mínimas para los civiles no solo es insostenible, sino que podría derivar en consecuencias grandes en el terreno internacional.