Desde que la Global Sumud Flotilla fue detenida por fuerzas israelíes, se escucharon múltiples voces que denunciaron desde maltrato hasta torturas y privación ilegítima de productos de primera necesidad a los activistas que se encuentran bajo la custodia de los soldados de Israel. Las autoridades de Tel Aviv negaron rotundamente las acusaciones.
Israel se defiende de las acusaciones
Mientras las negociaciones para alcanzar un cese de hostilidades en la Franja de Gaza parecen marchar sobre ruedas por primera vez en meses, las autoridades del Estado de Israel tuvieron que salir a declarar en contra de nuevas acusaciones de violaciones a los derechos humanos.
Esta vez en relación a la condición en la que se encuentran los activistas que participaron de la misión de la Global Sumud Flotilla, una flota con tripulantes y barcos de más de 40 países que buscó romper el bloqueo naval israelí alrededor de Gaza.
A medida que las acusaciones por maltratos, abusos y torturas concentradas principalmente en la figura de Greta Thunberg seguían trascendiendo, el Ministerio de Exteriores de Israel tuvo que salir a negar enérgicamente los hechos, por medio de un comunicado publicado en la mañana del domingo.
El comunicado asegura que “las acusaciones sobre el maltrato a Greta Thunberg y otros detenidos de la flotilla Hamás-Sumud son mentiras descaradas. Todos los derechos legales de los detenidos se respetan plenamente».
“La propia Greta y otros detenidos se negaron a acelerar su deportación e insistieron en prolongar su estancia bajo custodia. La activista sueca no presentó ninguna queja ante las autoridades israelíes sobre las acusaciones absurdas e infundadas, porque nunca ocurrieron», añade el comunicado.
Las denuncias de Greta
Si bien no es la primera vez que Greta Thunberg, la reconocida activista por los derechos humanos y el medio ambiente, termina arrestada por las autoridades israelíes, la referente mundial del activismo climático denunció las «condiciones inhumanas» a las que estaría siendo sometida como huésped de una prisión israelí.
Las declaraciones de los activistas que ya fueron deportados son alarmantes. Aseguran haber estado con las manos atadas a la espalda, privados de agua y alimentos durante casi 40 horas. A las mujeres musulmanas les habrían arrebatado sus pañuelos e hiyab.
Según las declaraciones de los activistas liberados, Greta Thunberg se habría llevado un trato especialmente duro: habría estado esposada todo el tiempo, fue obligada a sostener y besar una bandera israelí a la fuerza y duramente golpeada.
La activista turca Aycin Kantoglu denunció que «nos hicieron registros corporales una vez tras otra, incluso nos revisaron los dientes. Pero no lograron intimidarnos«, en una entrevista otorgada al medio NTV.
Otro de los activistas turcos arrestado por Israel, conocido como Ersin Celik, aseguró en declaraciones al medio CNN Türk que «Greta fue torturada de forma grave, la arrastraron por el suelo e intentaron forzarla a besar la bandera israelí».
«Greta es solo una niña, pero la atacaron deliberadamente. Trataron de criminalizar a toda la flotilla a través de ella», agregó.
El conflicto por la Global Sumud Flotilla
La tensa situación en Medio Oriente en relación a los acontecimientos que están ocurriendo en la Franja de Gaza empezó un nuevo capítulo a partir de la detención de los activistas a bordo de la Global Sumud Flotilla.
La flota de navíos salió desde España el pasado 31 de agosto con el objetivo de romper el bloqueo naval israelí alrededor de las costas de la Franja de Gaza, y llevar ayuda humanitaria que tan desesperadamente necesitan los civiles gazatíes.
No obstante, las embarcaciones que transportaban a activistas, periodistas, profesionales de la salud, defensores de los derechos humanos y legisladores nacionales de más de 40 países fue interceptada y asaltada por la fuerza naval de Israel mientras se encontraban navegando aguas internacionales, apenas a 70 millas náuticas de la costa de Gaza. Sus integrantes fueron arrestados y trasladados a Israel.