Luego del habitual rezo del Ángelus ante decenas de miles de fieles que lo observaron desde la plaza de San Pedro por el Jubileo Mundial de los Catequistas, León XIV expresó su solidaridad con las comunidades afectadas por los desastres naturales en el sudeste asiático, y lamentó «la miseria de pueblos enteros azotados por la guerra».
Domingo de homilía
Como parte de la tradición histórica, el papa León XIV, volvió a oficiar este domingo la tradicional misa dominical desde el icónico balcón del Palacio Apostólico que da al centro de la plaza de San Pedro. En el lugar se congregaron decenas de miles de fieles, en el marco del Jubileo Mundial de los Catequistas.
En esta oportunidad, el sumo pontífice volvió a recordar que «la miseria de pueblos enteros, azotados por la guerra y la exposición» se encuentra «a las puertas de la opulencia» y advirtió que en ocasiones «el beneficio pisotea la caridad».
En su homilía, el papa se referenció en la parábola de Lázaro y denunció: “¡Cuantos lázaros mueren frente a la avaricia que olvida la justicia, el beneficio que pisotea la caridad y la riqueza ciega frente al dolor de los necesitados!”.
En opinión del santo padre, se trata de una «situación muy actual» y lamento que «nada parece haber cambiado a lo largo de los siglos». A lo que agregó: “El hombre que vive en la abundancia, en cambio, no tiene nombre porque se pierde a sí mismo, olvidándose del prójimo… Está disperso en los pensamientos de su corazón, lleno de cosas y vacío de amor. Sus bienes no lo hacen bueno”.
Luchar contra la avaricia y la indiferencia
A continuación, el papa León XIV hizo énfasis en cómo la avaricia y la indiferencia siguen siendo características muy difundidas en la actualidad y señaló que “los muchos Lázaros de hoy nos recuerdan la palabra de Jesús, convirtiéndose en una catequesis aún más eficaz en este Jubileo”, lo que definió como “un tiempo de conversión y de perdón, de compromiso por la justicia y de búsqueda sincera de la paz”.
Como en ocasiones anteriores, el líder de la Iglesia Católica reconoció que «por una singular coincidencia«, el pasaje evangélico utilizado este domingo coincide con el que su predecesor, el papa Francisco, seleccionó como parte de su alocución durante el Jubileo de los Catequistas del Año Santo de la Misericordia, jubileo que el fallecido pontífice argentino convocó en 2015.
Un mensaje para las víctimas en Asia
En otro fragmento de su conversatorio, el papa León XIV expresó su dolor por las víctimas y desaparecidos en los últimos tifones registrados en Asia, así como a las poblaciones afectadas, «especialmente las más pobres». En los últimos días se reportaron más de 30 muertos debido a las inclemencias climáticas en la región.
“Estoy cerca de las poblaciones afectadas, especialmente las más pobres, y rezo por las víctimas, los desaparecidos, las numerosas familias desplazadas, las muchas personas que han sufrido inconvenientes y también por los socorristas y las autoridades civiles”, expresó León XIV.
Posteriormente profundizó en su mensaje al evidenciar que “en estos días, un tifón de fuerza excepcional ha golpeado varios territorios asiáticos, en particular las Filipinas, la isla de Taiwán, la ciudad de Hong Kong, la región de Guangdong y Vietnam”.
Los territorios mencionados por el sumo pontífice sufrieron esta semana daños catastróficos debido al paso del supertifón Ragasa, que generó grandes inundaciones y daños severos en el sur de China, luego de provocar al menos 17 muertos en Taiwán y una destrucción considerable en Hong Kong.
“Invito a todos a confiar en Dios y a la solidaridad. El Señor les dé toda fuerza y coraje para prevalecer sobre toda adversidad”, alentó León XIV.