A pesar del buen rumbo de las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania, el conflicto se mantiene activo entre ambos países, Así, los ataques con drones son comunes, advirtiendo su caída incluso sobre la planta nuclear en funcionamiento rusa, ubicada en la ciudad de Kursk, una de las localidades cuyo territorio se disputan en esta confrontación y que no ha sido mencionada dentro del llamado plan de intercambio de territorios propuesto por el presidente Donald Trump recientemente a sus homólogos Vladimir Putin y Volodomir Zelenski.
Caída del dron sería la causa del incendio
Kursk, una ciudad ubicada a una distancia aproximada de 400 kilómetros hacia el sur de la capital rusa, se encontraba bajo el dominio ucraniano hasta el pasado mes de abril, cuando el ejército ruso en un despligue recuperó la ciudad, dando una victoria relativa a su país. Desde ese momento hasta ahora ha habido diversos intentos fallidos por parte de Ucrania en mantener a su favor la estabilidad de ese territorio.
El incendio se registró en horas de la madrugada del domingo, hora local, y se originó aparentemente cuando tras su derribo el dron cayó sobre las instalaciones de la planta nuclear, específicamente cerca de un transformador que no se encuentra en la sección atómica de la planta el cual al recibir el impacto, estalló ocasionando el fuego en todos sus alrededores.
OIEA alerta sobre los ataques a la planta nuclear y otras instalaciones de energía atómica
A pesar de que la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha señalado de manera reiterativa que las instalaciones atómicas no pueden ser blanco de guerras o conclictos armados, ambos países han toma Kursk como bastión, pues otorga recursos y posee la planta nuclear, que luego de declarar el fin de la guerra deberá ser operada por el bando ganador .
En ese sentido, la OIEA ha rescatado la importancia de que en todas las guerras, las instalaciones como esta planta nuclear sean respetadas en una condición similar que a las embajadas o los centros de salud, los cuales requieren un perímetro de seguridad, esto debido al riesgo que representaría cualquier escape de radiación sobre la población tanto cercana como lejana a la planta nuclear.
De la misma manera, tras conocer sobre el ataque y el incendio producido sobre la planta nuclear la OIEA ha solicitado el acceso a las instalaciones para poder realizar una inspección independiente, de los niveles de radiactividad que podrian haberse incrementado tras el impacto de la aeronave. De esa manera, las autoridades han declarado que luego del incidente, se ha determinado que la actividad radiactiva permanece dentro de los níveles establecidos.
Incendio no dejó víctimas mortales
Autoridades de la planta nuclear, luego de que los bomberos capacitados para la evaluación y mitigación de ataque, apaciguaran el fuego, dieron declaraciones lamentando lo sucedido y especificando que debido a que el dron derribado no impactó de forma fuerte en las instalaciones, el incidente no habría dejado víctimas que lamentar y había sido extinguido de manera rápida y efectiva por los bomberos internos de la planta.
Igualmente, de acuerdo con las declaraciones oficiales no se reportaron daños estructurales importantes por lo que la operatividad de la planta no se vió afectada, sino durante el momento que se realizó la extinción del incendio y la evaluación de los daños que pudiera ocasionar el mismo. Luego, se retomó la capacidad operativa de la instalación nuclear, dedicada a la producción de energía.
De esta forma, en medio de las tensiones por la posible proximidad de un alto al fuego que obligue a Ucrania a entregar todos los territorios alcanzados, incluidos Kursk y Crimea, Rusia considera que este ataque representa un acto de sabotaje a todos los esfuerzos, a pesar de que Kiev no se ha atribuido el envío del dron que originó el siniestro.