Las autoridades militares de Polonia ordenaron el cierre temporal del espacio aéreo fronterizo, incluyendo dos aeropuertos en regiones cercanas a Ucrania y reforzaron la vigilancia en los territorios de la frontera polaco-ucraniana. A su vez, realizaron maniobras preventivas y aseguraron estar en condiciones de responder a cualquier amenaza de manera inmediata.
Polonia refuerza sus defensas
Tras el último bombardeo realizado por tropas rusas sobre la ciudad de Kiev, el Mando Operativo de las Fuerzas Armadas de Polonia, informó en las primeras horas de la mañana de este domingo que se han desplegado cazas y se activaron los sistemas de defensa aérea como medida «preventiva», con el objetivo de «garantizar la seguridad del espacio aéreo nacional y proteger a la población».
En este sentido, la Fuerza Aérea de Polonia, en coordinación con otros de sus países aliados, comenzaron a actuar en el espacio aéreo polaco como respuesta a los recientes bombardeos realizados por la aviación de largo alcance de Rusia contra Ucrania, según informó el mismo mando operativo en un comunicado oficial difundido a través de la red social X.
En el texto divulgado, las autoridades polacas señalan que las maniobras se están llevando a cabo «de acuerdo con los procedimientos aplicables» y activando todas «las fuerzas y recursos a su disposición».
Al mismo tiempo, como parte de los operativos, los técnicos militares polacos reforzaron la vigilancia en las regiones de su frontera compartida con Ucrania, apuntando a dar seguimiento a la situación actual y manteniendo «sus fuerzas y recursos subordinados listos para una respuesta inmediata».
Dos aeropuertos afectados
Teniendo en cuenta el contexto actual, y según los datos de la plataforma de seguimiento de vuelos FlightRadar24 y divulgados por el medio televisivo nacional TVN24, las autoridades polacas cerraron de forma temporal el espacio aéreo en torno a los aeropuertos de Rzeszów y Lublin, alegando una «actividad militar no planificada relacionada con garantizar la seguridad del Estados».
En pocas palabras, el Mando Operativo de las Fuerzas Armadas aseguraron que las acciones realizadas por las aviaciones polaca y aliadas fueron de carácter estrictamente defensivo y preventivo, focalizando en la capacidad de disuasión de posibles amenazas y en el mantenimiento de la integridad del espacio aéreo polaco, que se mantiene en alerta debido al conflicto bélico que se está desarrollando en el vecino país de Ucrania, desde que Rusia diera luz verde a la invasión terrestre del país en febrero de 2022.
El último ataque ruso
La activación de las maniobras preventivas de las fuerzas militares polacas y aliadas en la región, fue consecuencia del aviso realizado por medios ucranianos donde reportaron que Kiev y otras ciudades (como Zaporiyia o Jmelnitski) fueron objetivo de un ataque masivo por parte de Moscú.
Utilizando vehículos aéreos no tripulados y misiles, Rusia realizó uno de los bombardeos de largo alcance más importante de las últimas semana, llegando a provocar interrupciones parciales en el tráfico aéreo de la región.
Si bien hubo varias ciudades afectadas por los misiles y drones rusos en la última noche, la capital ucraniana de Kiev fue el blanco principal y la ciudad más afectada por la notable ofensiva de esta madrugada, que incluyó el uso de drones y terminó con un saldo de al menos cuatro muertos y una decena de heridos.
Del otro lado del frente, el Ministerio de Defensa de Rusia dio parte a través de su canal oficial de Telegram, que durante la misma noche fueron interceptados más de 40 drones ucranianos sobrevolando diferentes regiones del oeste de Rusia y la Ucrania ocupada, lo que deja en evidencia un intercambio de ataques que aportan a la intensificación del conflicto en el este europeo, a pocas semanas de cumplirse cuatro años de enfrentamientos.