Los bombardeos entre Israel e Irán continúan y mantienen al mundo en alerta, tal es así que la postura del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se fue modificando con el correr de los días, siendo que declaró que sabe donde se encuentra el líder Supremo Ayatolá.
En contexto, desde Tel Aviv, Israel lanzó ataques sobre instalaciones nucleares el pasado viernes, desde allí las consecuencias no calmaron porque Irán respondió con misiles y drones, mientras Estados Unidos y la comunidad internacional observan atentamente.
El gobierno norteamericano que no estaba participando de manera directa, incrementó su presencia militar en la región, envió buques de guerra y aeronaves confirma que Washington se prepara, a eso se le agrega las declaraciones de Trump desde la Casa Blanca que hicieron ver su cambio de postura.
Trump fue consultado sobre si Estados Unidos se sumaría a los ataques de Israel
Ante la consulta, el mandatario republicano respondió de forma evasiva pero con contundencia: “Podría pasar, o no. Nadie lo sabe”. Aunque puede sugerirse cierta ambigüedad, también se puede interpretar una ofensiva estadounidense contra Irán sobre la mesa.
Lo cierto es que, el líder republicano dio a entender que su gobierno le ofreció al régimen iraní un plazo de 60 días para renegociar un acuerdo nuclear pero que al no obtener respuesta, Israel decidió actuar por su cuenta, allí Trump marcó: “Ellos pudieron evitar todo esto”.
Desde ese momento, la Casa Blanca mantuvo reuniones de alto nivel con su Consejo de Seguridad Nacional, también el presidente decidió abandonar de manera anticipada la cumbre del G7 en Canadá, en donde se iba a reunir con Claudia Sheinbaum, para regresar a Washington y evaluar la situación.
La paciencia de EE.UU comienza a acabarse según el presidente
Sin dudas, Trump dejó en claro que la etapa diplomática y las vías de diálogo podrían estar llegando a su fin no cambian su postura, por eso aseguró que Irán intentó reabrir canales de negociación, pero que ya es “demasiado tarde”.
Pese a que no lo dijo de manera directa, deslizó que ahora busca imponer condiciones claras e insinuó que la respuesta norteamericana puede ser militar debido a la falta de avances, y que por eso, considera “eliminar por completo las capacidades nucleares iraníes.
Aunque para Trump, no es negociable que Teherán siga con ese tipo de desarrollo tecnológico, la declaración más llamativa fue cuando afirmó que su “paciencia se agotó”, dejando entrever que la decisión estaría tomada o cerca de concretarse.
La decisión del secretario de Defensa estadounidense y el rechazo de Irán
Tras las declaraciones presidenciales, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, no evitó alinearse al discurso del republicano y declaró que el ejército estadounidense se encuentra preparado para ejecutar cualquier decisión del gobierno. Del otro lado, el líder supremo Ali Khamenei rechazó con firmeza las condiciones impuestas por Washington.
Mientras tanto, sin confirmar acciones específicas, afirmó ante el Senado que todo dependerá del curso que defina la Casa Blanca pero Trump, fiel a su estilo, prefiere mantener suspenso: “Puede que lo haga, puede que no lo haga”. Israel alcanzó más de 1.100 objetivos en territorio de Irán, por eso la respuesta iraní hizo que se lanzaran más de 400 misiles, provocando al menos 24 muertos en territorio israelí.
Además, Khamenei fue duro contra la exigencia norteamericana de “rendición incondicional”, mencionando que se trata de una provocación inaceptable y reveló que las amenazas no cambian para nada la posición de Irán, porque indica que su programa nuclear es civil. En su discurso de resistencia iraní, se hace mención a la cifra de víctimas tras los ataques perpetrados por Netanyahu, pero fuentes independientes estiman más de 580 muertos, incluidos casi 240 civiles.