La crisis humanitaria que enfrenta la Franja de Gaza está llegando a un estado crítico en su ya devastado estado de salud, debido a que el único hospital especializado en atención cardíaca y tratamiento del cáncer dejó de operar esta semana.
Esto golpea al enclave palestino desde hace más de un año y medio, pero el anuncio fue realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que confirmó que el establecimiento quedó fuera de servicio tras un ataque aéreo israelí.
El hospital en cuestión europeo de Jan Yunis, se encontraba en el sur de Gaza y era el último en ofrecer servicios avanzados como neurocirugía, cardiología y oncología. Mediante un mensaje de redes sociales, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, expresó su preocupación porque alertó que ninguna otra instalación médica en la zona está equipada para asumir esta carga asistencial.
La clausura del hospital pone en jaque al sistema sanitario de Gaza
La salud se encuentra al borde del colapso por el hospital de Jan Yunis, según la organización Médicos Sin Fronteras, esta instalación era “uno de los últimos salvavidas” operativos en el sur del enclave, y su destrucción agrava aún más la ya precaria capacidad de respuesta frente a emergencias médicas.
Fue la ONG quien notificó que la mayoría de los hospitales que aún funcionan lo hacen de manera parcial y bajo condiciones extremas por que desde MSF, indicaron que las instalaciones están colapsadas, con personal insuficiente y recursos médicos cada vez más escasos.
Por su parte, denunció que los ataques a la infraestructura de salud son parte de una estrategia que pone en peligro la vida de miles de personas. Sin embargo, la ONG sostiene que estos hechos convierten a Gaza en un lugar donde la atención médica se vuelve inaccesible.
La situación sanitaria tiene consecuencias devastadoras
En el marco de este duro panorama bélico entre Palestina e Israel, la situación sanitaria no se separa del conflicto armado que arrasa Gaza desde octubre de 2023, cuando se intensificaron las hostilidades tras el ataque perpetrado por Hamás en el sur de Israel, pero desde entonces los bombardeos fueron constantes, y las víctimas aumentan.
Cabe mencionar que la Defensa Civil de Gaza, registró el jueves al menos 120 muertos como resultado de nuevos ataques aéreos porque la densidad del fuego cruzado, según testigos, no disminuye ni durante la noche, lo que generó un clima de temor en la población.
Todo esto se dio a conocer porque las imágenes del hospital afectado fueron compartidas por personal humanitario, allí muestran edificios muy dañados, salas destruidas y equipos inutilizables. La pérdida de este hospital significa una sentencia de muerte para quienes tengan enfermedades crónicas o en tratamiento oncológico.
La OMS lo dejó claro: la atención que prestaba Jan Yunis no tiene reemplazo inmediato
El cierre de esta unidad médica hace pensar que no se trata solo de la destrucción de un hospital, sino de la desaparición de capacidades médicas que no pueden ser suplidas en ninguna otra parte de Gaza, por eso la OMS insiste en que la atención especializada que se prestaba en Jan Yunis no tiene reemplazo inmediato.
Para tomar en cuenta la importancia de este daño, hay que indicar que los pacientes con enfermedades como cáncer, problemas cardíacos graves o lesiones cerebrales complejas ya no podrán recibir tratamiento dentro de este conflicto y además, la evacuación hacia el exterior no es posible debido al bloqueo y las restricciones de movilidad.
De todas formas, el deterioro paulatino del sistema de salud en Gaza muestra las consecuencias acumuladas de meses de enfrentamientos. Con cada hospital destruido o cerrado, no solo se reducen las opciones médicas, sino la esperanza de vida para la población.