Más de cien gobiernos se congregan en la cumbre climática de la ONU con el fin de fortalecer sus compromisos nacionales (NDC) y asi combatir la crisis. En este contexto, Xi Jinping, presidente de China, el principal emisor mundial de gases de efecto invernadero por su gran población y producción manufacturera, ha indicado que su país está cambiando de enfoque. El país asiático aspira a convertirse en líder de la lucha contra el calentamiento global.
Xi Jinping anuncia el interés de China en la defensa del futuro climático
China se ha distanciado del escepticismo de la administración de Donald Trump, que se inclina hacia el negacionismo climático, y parece estar redefiniendo su papel. El país, que históricamente ha tardado en implementar medidas de descarbonización, ahora busca posicionarse como un defensor activo, demostrando una voluntad de liderazgo en un área que resulta crucial para el futuro climático del planeta.
El presidente chino, Xi Jinping, presentó los nuevos planes climáticos nacionales (NDC) con vista al 2035 ante la ONU. Los compromisos incluyen una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero de entre 7% y 10% respecto a su pico máximo. Además, Xi anunció un aumento considerable en el uso de energías limpias, prometiendo que el consumo de energía no fósil superará el 30% del consumo total del país.
El enfoque de la propuesta y una dura critica al presidente Trump
Esta propuesta tiene el lineamiento para lograrse con la instalación de 3.6 gigavatios de capacidad solar y eólica, una meta seis veces mayor que el nivel de 2020. Finalmente, China expandirá su sistema de comercio de emisiones a sectores de alta polución y fortalecerá la resiliencia social ante el cambio climático. Xi Jinping optó por no establecer un año base específico para la reducción de emisiones.
En lugar de especificar, estableció que el objetivo de disminución se vinculó al momento en que las emisiones de China alcancen su nivel máximo histórico, según las tendencias y datos actuales, es posible que China haya alcanzado su pico máximo de emisiones de carbono en 2024. De ser confirmado, este hito se lograría antes de lo previsto en su plan de acción climática inicial, el cual establecía la meta de alcanzar dicho umbral antes de 2030.
Xi Jinping instó a las naciones desarrolladas a intensificar sus políticas para alcanzar una mayor reducción de emisiones. Además, lanzó una crítica a Estados Unidos por su escepticismo climático, refiriéndose a la retirada del Acuerdo de París por parte de la administración de Trump. Xi enfatizó que, pese a que algunos países esten contra la tendencia, la comunidad internacional debe mantener un rumbo firme y la transformación ecológica como una prioridad inquebrantable.
Ante la incredulidad de algunos, China podría crear un cambio histórico de lograr sus objetivos
A pesar de los nuevos anuncios, muchos expertos critican que el plan climático de China para 2035 podria tacharse de insuficiente para evitar una catástrofe. Kaysie Brown, de E3G, señaló que el objetivo no se alinea con la descarbonización necesaria ni con la meta de neutralidad de carbono para 2060. Esta falta de ambición podría socavar la credibilidad de China como líder en economía limpia, enviando señales confusas a los mercados.
No obstante, hay quienes sugieren que China tiene un historial de establecer metas conservadoras que luego logra superar ampliamente. Bernicie Lee, una investigadora de renombre de Chatham House, indicó que los mercados y gobiernos se enfocarán en la dirección general de China, más que en los detalles específicos de sus planes, marcando un hito histórico en la forma de reducir el efecto invernadero.
El día anterior, el presidente, Donald Trump, usó su discurso en la Asamblea General de la ONU para desestimar la ciencia y calificar el cambio climático de estafa. Trump inició la retirada de su país del Acuerdo de París, cuyo fin es limitar el calentamiento global a 1.5 ºC. Cabe destacar que Estados Unidos es el segundo mayor emisor actual de gases de efecto invernadero y el mayor emisor histórico.