El juez Curtis Farber, que supervisa el juicio de Harvey Weinstein, anuló el proceso por un cargo de violación este jueves, debido a las fuertes diferencias entre los miembros del jurado, una situación que reflejó la complejidad del caso y estancó el proceso judicial. El juez explicó al jurado que las deliberaciones se habían intensificado tanto que tuvo que declarar nulo el juicio respecto al único cargo sin veredicto.
Tensiones en el jurado se presentaron durante las deliberaciones
El miércoles temprano, los miembros del jurado en el nuevo juicio de Harvey Weinstein en Nueva York recibieron la orden de tomarse un descanso y calmarse después de que sus deliberaciones se tornaran difíciles, con gritos y amenazas, lo que evidenció la alta tensión y el desacuerdo que reinaba en la sala de deliberaciones. La situación se había vuelto tan conflictiva que la intervención del juez fue necesaria para restaurar el orden.
Una inusual amonestación se produjo tras una reunión privada entre un jurado y el juez, la tercera de su tipo en un juicio ya marcado por problemas con el jurado, lo que evidenció las crecientes tensiones dentro del panel decisorio y la dificultad de alcanzar un consenso. Esta situación impulsó a Harvey Weinstein a intentar, sin éxito, apelar directamente al juez para que anulara el juicio.
El presidente del jurado declaró haber alcanzado una resolución firme respecto a uno de los cargos contra Weinstein
El presidente del jurado, quien emigró de República Dominicana a Estados Unidos en 1996, solicitó hablar en privado con el juez Curtis Farber, y la situación se tornó dramática. En una sala aparte, expuso sus preocupaciones al juez y a los abogados. Afirmó haber tomado una decisión inamovible sobre uno de los cargos contra Weinstein, lo que, según la transcripción de la conversación, provocó gritos de otros miembros del jurado.
Este incidente, que ofreció una nueva perspectiva sobre las fricciones comunes que pueden surgir entre los jurados en juicios de alto perfil (desacuerdos que suelen mantenerse en privado), no fue el primer indicio público de conflicto entre los jurados del nuevo juicio a Weinstein. De hecho, este miembro era el tercero en conversar con el juez Farber desde el viernes, en los cuatro días que llevaban deliberando.
Arthur Aidala, abogado de Harvey Weinstein, solicitó en varias ocasiones la anulación del juicio debido a las crecientes tensiones entre los miembros del jurado, sin éxito. La situación se intensificó el miércoles cuando el presidente del jurado reiteró sus quejas, lo que llevó a Aidala a pedir una nueva anulación y a acusar directamente al juez de no haber protegido adecuadamente a los jurados de las presiones internas.
Nueva selección del jurado se realizó al añadir cargos por abuso sexual
El jurado regresó instantes después para anunciar su veredicto parcial: culpable de agresión sexual en primer grado contra Miriam Haley, e inocente del mismo cargo para Kaja Sokola, una modelo. Los miembros del jurado deberán presentarse de nuevo el jueves para proseguir las deliberaciones sobre la tercera acusación del juicio, violación en tercer grado, vinculada a las alegaciones de agresión de Weinstein a Jessica Mann.
Harvey Weinstein ha apelado la condena que recibió tras ser declarado culpable de violación y agresión sexual en su juicio de 2020 en Manhattan. Ese veredicto, que le acarreó 23 años de prisión, se consideró un momento decisivo para el movimiento #MeToo. Más tarde, también fue hallado culpable de agresión sexual en un caso distinto en Los Ángeles, donde recibió una sentencia de 16 años de cárcel.
La selección del jurado para el nuevo proceso contra Harvey Weinstein comenzó en abril, tras la adición de un nuevo cargo de delito de agresión sexual. Este nuevo juicio se inició después de un importante revés legal para la fiscalía. Esto ocurrió luego de que la Corte Suprema de Nueva York anulara su condena de Manhattan el año pasado, lo que llevó al fiscal de distrito Alvin Bragg a anunciar que su oficina lo volvería a juzgar.
