Una de las mayores amenazas para el futuro de la humanidad se está multiplicando a un ritmo imparable. Convirtiéndolo en un problema cada vez más grave, que podría afectar de manera irreversible a todo el planeta. A continuación te desvelamos de qué se trata esta preocupación que tiene en vilo a los científicos del mundo, y sus temibles consecuencias.
La mayor amenaza del futuro de la humanidad
La Agencia Espacial Europea (ESA) ha publicado una visualización que expone el problema que cada día va en aumento. Esta situación resulta cada vez más grave, pues el nivel de contaminación que se evidencia amenaza la sostenibilidad tanto dentro como fuera de la Tierra.
Este fenómeno ha causado angustia en los científicos y autoridades internacionales. Por ello, el seguimiento y análisis sobre el aumento de esta amenaza resulta ser clave para la sostenibilidad y seguridad de la humanidad.
Pero, ¿qué es lo que preocupa tanto a los científicos? Pues bien, se trata del incremento de basura espacial, en donde se estima que existen más de 100 millones de objetos que orbitan la Tierra y amenazan satélites.
Estos millones de fragmentos que orbitan la Tierra provienen de restos de satélites fuera de servicio, cohetes y fragmentos de naves. Donde cerca de 10 200 satélites permanecen activos, mientras que los demás son desechos que se desplazan a velocidades extremas.
La sostenibilidad del entorno espacial
La ESA ha desarrollado el Índice de Salud del Entorno Espacial, como una herramienta para evaluar el impacto que tienen las actividades humanas fuera del planeta. Este indicador ha sido incorporado en el último informe sobre la sostenibilidad orbital, midiendo qué tan seguro es el uso del espacio.
Por su parte, este índice usa una escala donde el valor 1 significa el umbral de sostenibilidad a largo plazo. Pero se ha evidenciado que actualmente se encuentra ubicado en el valor 4, lo que significa que el entorno se está volviendo cada vez más desfavorable para las operaciones espaciales.
Es notorio que actualmente estamos atravesando una situación crítica y creciente. Donde la congestión orbital es un síntoma de la falta de control sobre la gestión de los residuos tecnológicos fuera del planeta.
Por lo que la ESA advierte que, si no se toman medidas cuanto antes, el espacio podría llegar a ser inoperable en ciertas zonas. Y así contáramos con proyectos tan innovadores como el que te revelamos en este artículo, igual podríamos perder la capacidad de usar el espacio exterior para servicios clave.
Esto es lo que genera el incremento de la basura espacial
Una de las mayores amenazas a largo plazo es sin duda la acumulación de los desechos espaciales, que podría causar el llamado síndrome de Kessler. El cual se refiere a una cadena de colisiones que inutiliza sectores completos de la órbita terrestre.
Esto genera gran preocupación debido a que, según Josef Aschbacher, quien es director general de la ESA, muchos servicios claves se monitorean desde el espacio exterior. Tal es el caso de los datos sobre el medio ambiente y el clima, que aproximadamente el 80% proviene de satélites.
Esta situación afectaría la vigilancia de fenómenos naturales, como erupciones, inundaciones y hasta incendios, que gracias a estos equipos se vigila en tiempo real. Además, afectaría las comunicaciones, los GPS y la navegación por internet, que son servicios esenciales utilizados diariamente.
De igual forma, los desechos espaciales suponen un nuevo límite de contaminación, que se extiende desde la Tierra hacia el cosmos. Asimismo, los fragmentos que reingresan a la atmósfera, aunque la mayoría se desintegre, también liberan partículas metálicas que podrían afectar la composición de la atmósfera.
Sin duda, esta situación supone un peligro inminente que, de no tomarse las medidas necesarias, podríamos estar frente a una de las mayores amenazas de la humanidad. Donde se verían afectados todos los avances que ha logrado el hombre con el paso del tiempo. Pero acciones como las que te explicamos en este artículo podrían ayudarnos a tener un planeta más sostenible.
