En una investigación recientemente publicada, se ha determinado que, a pesar de que son deliciosas y de que ayudan a progresar en el gimnasio, podrían estar envenenándote lentamente. A continuación te explicamos el peligro que podrías estar consumiendo y si realmente necesitas de ella para obtener buenos resultados.
Te ayudan a progresar en el gimnasio, pero ¿a qué costo?
El pasado 14 de octubre fue publicada una exhaustiva investigación de Consumer Reports. Donde se evidenció el peligro inminente al que nos podemos estar enfrentando si buscamos un progreso más rápido en los gimnasios.
Por su parte, estos productos nacieron en los foros de culturismo y en los gimnasios. Los cuales en la actualidad han dado un gran salto, pues están conquistando redes sociales y estanterías en diferentes establecimientos.
Sin embargo, a pesar de que estos productos prometen dar más fuerza en cada sorbo, el estudio reciente determinó que muchas de estas proteínas en polvo están contaminadas con metales pesados y tóxicos como el plomo.
Cabe destacar que el análisis se realizó a 23 batidos y polvos proteicos que son muy populares en Estados Unidos. Donde resultó que la mayoría mostró elevados niveles de plomo, que se encuentran por encima de lo recomendado.
Las proteínas que están envenenándote lentamente
Para desarrollar la investigación, los científicos analizaron muestras de varios lotes de cada uno de los 23 productos. Con el fin de evaluar el total de la proteína, el plomo, el arsénico, el cadmio, así como otros elementos.
Las proteínas analizadas contenían la cantidad de proteína que indicaban en sus envases, y hasta 60 g de más por porción. Pero lo que puso en alerta a los investigadores fueron los elevados niveles de plomo encontrados en los productos.
Puesto que el 70% de los polvos de proteína superaron en su mayoría el 120% del nivel de preocupación. Mientras que otros tres productos superaron cantidades de arsénico inorgánico y cantidades de cadmio. Entre los suplementos proteicos analizados, los resultados más alarmantes fueron los de los vegetales, que en su mayoría estaban hechos de guisantes.
Dando como resultado que dos de los analizados contenían una cantidad tan elevada de plomo que los investigadores sugirieron a los consumidores evitarlos por completo. Sin duda, esta situación despierta las alarmas del mundo entero, tal y como este reciente hallazgo que mantiene en vilo a la humanidad.
Esto es lo que hace el plomo en el organismo
El plomo puede permanecer en el organismo y acumularse durante años. Lo que podría generar daño nervioso, retrasos en el funcionamiento mental, hipertensión arterial, debilitamiento en los huesos y hasta riesgo de padecer cáncer. Afectando más a los niños y mujeres embarazadas.
Sin embargo, los investigadores aseguran que no hay motivo para alarmarse si se han consumido estos productos anteriormente. Puesto que las proteínas que tienen los niveles más altos de plomo se encuentran muy por debajo de la concentración necesaria para provocar un daño instantáneo.
Además, aseguran que muchas personas ni siquiera necesitan tanta proteína como creen. Por ejemplo, en adultos de 63 kilos, que deberían consumir solo 53 gramos diarios de proteína, alimentos como la pechuga de pollo o yogur griego les permitirían lograr la ingesta diaria necesaria, a excepción de grupos especiales como ciertos deportistas.
Pero para quienes desean seguir usando estos productos, los investigadores sugieren elegir proteínas que sean de origen animal o lácteo, que a menudo tienen menos contaminación que las proteínas vegetales.
En definitiva, esta situación supone un gran riesgo para la humanidad, pues a pesar de que las cantidades de plomo son inferiores a lo necesario para causar un daño inmediato, se debe ser cauteloso, ya que exponerse repetidamente a metales pesados podría estar envenenándote lentamente y causar daños inminentes como el que te explicamos en este artículo.
