ECOPORTAL
  • México
  • Economía
  • Energía
  • Motor
  • Tecnología
  • Clima
  • Más+
    • CONSTRUCCIÓN
    • ALIMENTACION
      • Alimentos
      • Huerta
      • Recetas
    • SALUD
      • Enfermedades
      • Remedios Naturales
    • ECONCIENCIA
      • Eco Hogar
      • Vida Consciente
      • VIDEOS
  • The Pulse
  • Contacto
  • México
  • Economía
  • Energía
  • Motor
  • Tecnología
  • Clima
  • Más+
    • CONSTRUCCIÓN
    • ALIMENTACION
      • Alimentos
      • Huerta
      • Recetas
    • SALUD
      • Enfermedades
      • Remedios Naturales
    • ECONCIENCIA
      • Eco Hogar
      • Vida Consciente
      • VIDEOS
  • The Pulse
  • Contacto
Sin resultados
Todos los resultados
ECOPORTAL
Sin resultados
Todos los resultados

Extracción de agua profunda podría arriesgar salud de consumidores de CDMX

Por Iramaru H.
19 mayo, 2025
en Agua
agua

Fuente Carbotecnia

Estados Unidos elimina restricciones a químicos eternos en el agua potable

El desperdicio de agua será multado con más de 11 mil pesos

Conagua empleará tecnología de punta para resolver las fugas de agua en CDMX

La capital mexicana (CDMX) depende en gran medida de sus recursos hídricos subterráneos, ya que el 60% del agua que consumen sus habitantes se obtiene de una extensa red de 470 pozos distribuidos por toda la ciudad. La creciente demanda está obligando a extraerla de acuíferos cada vez más profundos. Esta práctica genera una preocupación en cuanto a la calidad del agua, pues a mayores profundidades existe una mayor probabilidad de encontrar metales pesados disueltos de forma natural en el subsuelo.

Metales pesados pueden superar los límites que afectan la salud humana

Sustancias químicas persistentes y metales como el arsénico, el cromo, el plomo, el fluoruro, el selenio y el hierro, si se presentan en concentraciones elevadas, pueden acarrear serios riesgos para la salud de la población, desde problemas gastrointestinales hasta efectos neurológicos y un mayor riesgo de desarrollar ciertas enfermedades de gravedad a largo plazo, tales como cáncer o infertilidad.

En ese sentido, es crucial implementar medidas de monitoreo y tratamiento rigurosas para garantizar la potabilidad del agua y proteger la salud pública ante esta realidad. Según Carlos Vargas Cabrera, director académico del Centli, la extracción desmedida de agua del acuífero del Valle de México ha ocasionado un rápido declive del nivel del agua subterránea, que actualmente disminuye entre 1.6 y 1.9 metros anualmente.

Según otros expertos, la calidad del agua está directamente relacionada con la profundidad de extracción: cuanto más profundo se perfora, mayor es la temperatura del agua, que puede alcanzar los 48 grados Celsius, lo que incrementa su capacidad para disolver diversas sustancias, incluyendo sales y metales pesados, que terminan incorporándose al líquido y terminan contaminando los cauces.

La necesidad de excavar pozos a mayor profundidad podría acarrear serias repercusiones para el equilibrio natural de la región

La sobreexplotación contínua está agotando progresivamente las reservas subterráneas, lo que no sólo implica la necesidad de perforar pozos cada vez más profundos sino que también puede tener consecuencias graves para el ecosistema local. Pues la cercanía de cada perforación hace que los acuíferos se agoten, causando mayores sequías en la zona y a lo largo de los cauces.

Además, el hundimiento del terreno, la disminución del caudal de manantiales y la alteración de la disponibilidad futura del recurso hídrico para las generaciones venideras en esta importante región son consecuencias extras que van a afectar también al ecosistema. Por consiguiente, las afectaciones que pueden esperarse se expanden además a la fauna y la flora que conviven en los territorios donde se explotan las fuentes de agua.

Estos elementos pueden persistir durante largo tiempo en el agua

En el año 2000, el antiguo Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), trabajando junto con investigadores del Instituto de Geología de la UNAM y con el apoyo técnico de Petróleos Mexicanos, realizó la perforación de cinco pozos en Iztapalapa. De estos, se consideraron viables el pozo de San Lorenzo Tezonco, que comenzó a funcionar en 2013, y el de Santa Catarina 3, que inició operaciones en 2017.

La viabilidad de estas perforaciones se estudió debido a la presencia de diesel en una cantidad de partículas por millón que supera los límites y que posteriormente se determinón que su antiguedad en los pozos era superior a 40 años, con lo que se muestra una persistencia del químico en el largo plazo. Con esto, se sostiene que el agua en CDMX puede estar contaminada por el tipo de envase en que se distribuye y por los químicos que están presentes.

El problema fundamental se presenta debido a la profundidad de las excavaciones, las cuales en la actualidad están superando los 2 000 metros, con lo que el cuerpo acuoso se termina afectado por la cantidad de metales y sales que se le incorporan al contacto y por la temperatura. Así, esta agua debe ser mezclada para diluir las concentraciones que se encuentren fuera de norma, especialmente de boro, aluminio y otros metales pesados.

Tags: Última hora
  • Contacto
  • Aviso Legal
  • Política de privacidad
  • Publicidad

© 2025 Ecoportal - Todos los derechos reservados / Stock Photos - Depositphotos.com

Sin resultados
Todos los resultados
  • México
  • Economía
  • Energía
  • Motor
  • Tecnología
  • Clima
  • Más+
    • CONSTRUCCIÓN
    • ALIMENTACION
      • Alimentos
      • Huerta
      • Recetas
    • SALUD
      • Enfermedades
      • Remedios Naturales
    • ECONCIENCIA
      • Eco Hogar
      • Vida Consciente
      • VIDEOS
  • The Pulse
  • Contacto

© 2025 Ecoportal - Todos los derechos reservados / Stock Photos - Depositphotos.com