Nuestro compromiso con el planeta es clave para cambiar el futuro

Todos los habitantes del planeta, tenemos el derecho a vivir una vida sana, en un medio ambiente limpio y sostenible, y somos los responsables sin dudas de conservarlo y de garantizar su equilibrio presente y futuro. Es necesario y urgente recuperar el concepto de conciencia ambiental, como filosofía de vida, sabiendo que lo que más deteriora la naturaleza, es el ser humano.

Según el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, la decisión de reconocer como un derecho humano tener acceso a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible se trata de “proteger a las personas y al planeta: el aire que respiramos, el agua que bebemos, los alimentos que comemos. También se trata de proteger los sistemas naturales, que son condiciones previas básicas para la vida y el sustento de todas las personas, dondequiera que vivan”.

Así como debemos tener respeto por el medio ambiente, también debemos saber que nuestro planeta sufre un cambio climático y se está calentando. Desde 1880, la temperatura promedio en la superficie del planeta ha aumentado un casi 1ºC y hace ya más de 30 años, el cambio de temperaturas se acentuó y poco a poco nos va complicando las cosas. Si te interesa, en el sitio de Proyecto Tierra podrás encontrar más información sobre este tema.

Para entender un poco más hay que conocer la definición del cambio climático según la NASA: “se refiere a un rango amplio de fenómenos globales, creados predominantemente por la quema de combustibles fósiles, lo que agrega a la atmósfera terrestre gases que atrapan el calor”

La agencia aeroespacial estadounidense amplía que “estos fenómenos incluyen el aumento de la temperatura (comúnmente descrito como calentamiento global), pero también incluyen cambios como el aumento en el nivel del mar, la pérdida de masas de hielo en Groelandia, Antártida, el Ártico y en los glaciares montañosos de todo el mundo, cambios en la floración de plantas y fenómenos climáticos extremos”.

El futuro del planeta está en nuestras manos

La preocupación por la crisis climática crece cada vez más y muchas personas se preguntan si pueden aportar su grano de arena para intentar frenarla. La respuesta es sí y es muy sencillo, solo requiere que cada persona incorpore algunos hábitos que permitan disminuir su huella de carbono.

Por eso es importante ser consciente y estar informado de lo que ocurre en nuestro planeta, para combatir el cambio climático, y hacer las cosas mejor de lo que se han hecho hasta ahora. Uno de los sitios importantes a consultar es Proyecto Tierra en el que se pueden observar variedad de temas abordados que incluyen desde datos curiosos del mundo animal, como cuántos corazones tiene un pulpo, o los diferentes hábitats y sus problemáticas; hasta tips sobre que puede hacer cada uno de nosotros para ayudar a preservar el planeta en el que habitamos.

Como colaborar para mejorar el medio ambiente

Más arriba en la nota mencionamos el concepto de ‘huella de carbono’, que se define como un indicador ambiental que pretende reflejar la totalidad de gases de efecto invernadero emitidos por efecto directo o indirecto de un individuo, organización, evento o producto. Cuánto más podamos disminuir esta huella de carbono, mejor para nuestro planeta.

Hay algunas cosas que podemos hacer, para mejorar notablemente el medio ambiente y mientras más seamos, más eficiente será nuestra lucha para revertir las malas condiciones que azoran la Tierra.

Por ejemplo:

-Reciclar: es muy importante separar la basura, en desechos orgánicos e inorgánicos y de esta manera contribuir en el  ahorro de recursos renovables y también de energía, ya que al separar, los materiales reciclables pueden ser reutilizados en la cadena de producción, logrando así reducir la extracción de recursos naturales del ecosistema.

-Apagar las luces cuando no son necesarias y desenchufar los aparatos electrónicos: el ahorro de energía es fundamental para bajar las emisiones de CO2, reduciendo el consumo energético en nuestros hogares.

-Cerrar las canillas en forma correcta y cuidar el agua: ahorrar y darle un uso eficiente al agua, cerrando las canillas y controlando que no existan fugas. Para la ONU, el agua es la base del desarrollo sostenible y el desarrollo socioeconómico mundial. En la actualidad la escasez de agua ya afecta a 4 de cada 10 personas.

-Llevar bolsas propias al supermercado: es fundamental evitar el uso de bolsas de plástico, ya que la producción de estas, requiere la utilización de aproximadamente 12 millones de barriles de petróleo, su degradación tarda aproximadamente 20 años.

-Además es bueno reciclar el papel: permite dar una segunda vida a este material compuesto por la celulosa en forma de fibra procedente principalmente de la madera de los árboles. Tras un proceso, vuelve a ser útil de múltiples formas a la vez que contribuye con el mantenimiento del medioambiente.

-Hacer turismo sostenible: es aquel que sigue los principios de sostenibilidad, minimizando el impacto sobre el medio ambiente y la cultura local. Fomenta el empleo de la comunidad local

-Evitar consumo masivo: hay que evitar los consumos superfluos, no derrochar recursos, mantener en buen estado lo que tenemos y reparar lo que se haya deteriorado. El objetivo es consumir en forma consciente