En el mes de junio, China logró un repunte notable en su actividad comercial con el resto del mundo, luego de semanas marcadas por las medidas arancelarias con Estados Unidos. Según datos de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), el comercio exterior medido en yuanes creció un 5,2 % interanual en el sexto mes de 2025.
Lo cierto es que, esta cifra representa casi el doble del avance en mayo, cuando apenas alcanzó un 2,7 % debido a los efectos de la disputa comercial con Washington. Sin embargo, los intercambios totales entre China y otros países sumaron 3,85 billones de yuanes, lo que equivale a unos 537.319 millones de dólares.
De este total, al parecer las ventas al exterior tuvieron un peso clave, superando las previsiones de los analistas, que veían con cautela los efectos del nuevo régimen de licencias para ciertos productos estratégicos.
Las exportaciones superan expectativas y fortalecen superávit
Las ventas de productos chinos al extranjero crecieron un 7,2 % frente a junio de 2024, sumando cerca de 2,34 billones de yuanes pero en dólares, esto representa alrededor de 326.256 millones. En el caso de las importaciones, subieron un 2,3 % y se situaron en unos 1,51 billones de yuanes, equivalentes a 211.064 millones de dólares.
Pese a que el superávit comercial de China alcanzó los 825.970 millones de yuanes, lo que supone un incremento del 17,37 % respecto al mismo periodo del año anterior también Trump revela los detalles del nuevo acuerdo comercial. Ante esto, esta diferencia reafirma la solidez del sector exportador, pero con controles y revisión de licencias para productos claves.
A lo largo del primer semestre de 2025, el volumen de intercambios globales medido en yuanes se elevó un 2,9 %. Mientras las ventas al exterior avanzaron un 7,2 %, las importaciones reflejaron una contracción del 2,7 %, evidencia de que la demanda interna sigue mostrando señales de cautela ante la evolución de la economía mundial.
Para prestar atención: las tierras raras de China reactivan envíos estratégicos
Algo en lo que hay que tener en cuenta es que la recuperación de junio fue la liberación parcial de licencias para exportar tierras raras que son elementos muy importantes para sectores como la industria de semiconductores, automóviles eléctricos y tecnología de defensa, habían sido motivo de fricción entre China y Estados Unidos.
Tras la imposición de nuevas licencias obligatorias desde abril, los envíos se habían reducido de manera notable. Sin embargo, tras el compromiso de Pekín de acelerar la revisión y aprobación de solicitudes, la exportación de tierras raras repuntó un 32 % entre mayo y junio.
Además, en términos interanuales, el aumento fue de más del 60 %, según cálculos basados en los datos de la Administración General de Aduanas. Pese a este impulso en volumen, el valor total de las ventas de tierras raras descendió un 24,4 % en el acumulado semestral.
Al haber un pacto comercial, la situación cambió
El pacto con Estados Unidos permitió calmar los ánimos tras varias semanas de amenazas arancelarias y restricciones de exportación. Desde abril, China había reforzado su control sobre siete minerales clave del grupo de tierras raras, afectando la cadena de suministros de varias industrias internacionales.
Pese a lo mencionado, el acuerdo sellado en Londres hace poco más de un mes incluyó la promesa de revisar con mayor agilidad las solicitudes de exportación, especialmente para aquellos productos sujetos a licencias de seguridad nacional. Esto no solo evitó un mayor deterioro de las relaciones comerciales, sino que permitió sostener la tregua arancelaria acordada en mayo.
De momento, China confía en mantener la tendencia positiva en la segunda mitad del año debido a que analistas observan que el superávit robusto y la recuperación de productos estratégicos podrían aportar estabilidad a su balanza comercial porque el país asiático reanuda el comercio de tierras raras, mientras continúa ajustando políticas para equilibrar la protección de recursos y la competitividad exterior.